BUENOS DIAS
VERACRUZ
David Varona
Fuentes
Viernes 8 de
julio del 2016.
Quisiera no
escribir más de corrupción, impunidad y enriquecimiento ilícito en Veracruz.
Que no
hubiera más que informar sobre políticos multimillonarios protegidos con
el manto de la complicidad.
Que los 50
mil millones de pesos detectados por la Auditoría Superior de la Federación
fuera la suma total del saqueo financiero a las instituciones de la entidad.
Imposible
soñar.
Cada día que
termina quedan al descubierto más fraudes y robos millonarios cometidos con
dinero público.
Lo anterior
indica…
Que los
delincuentes de cuello blanco se encuentran incrustados en todo el organigrama
gubernamental y descentralizado de la geografía estatal.
Y operan con
respaldo y complacencia oficial.
Hoy
hablaremos del Sistema de Agua y Saneamiento de los municipios de Veracruz y
Medellín de Bravo (Boca del Río se desincorporó desde principios de año)
El SAS es
otra mina de oro.
Y el
principal cabecilla que la explota se llama Fidel Herrera Beltrán, el ex
gobernador que no tiene llenadera.
Durante
12 años, de 2004 a 2016, SAS fue caja grande de políticos rojos y azules
enquistados en los ayuntamientos de Veracruz, Boca del Río y Medellín de Bravo.
De sus arcas
recaudadoras por el suministro de agua potable, fueron financiadas campañas de
candidatos a presidentes municipales y diputados, del PRI y PAN.
No era para
menos.
El botín del
SAS es enorme, daba para todo. Hasta para cubrir nóminas secretas
de aviadores compuesta por amantes, compadres y recomendados de políticos
influyentes, que percibían sueldos mensuales de 30 a 120 mil pesos.
Cada año
ingresan a la tesorería de SAS cerca de 400 millones de pesos, siendo los meses
de enero a marzo los de mayor ingreso por el cobro anual anticipado.
Todo se lo
roban.
Cuando el SAS
fue privatizado, la clase política que lo saqueaba aseguró que la catástrofe
financiera del organismo llegaba a su fin.
El Grupo
Metropolitano de Agua y Saneamiento (MAS) representado por inversionistas
brasileños, “ganador” de la concesión por 30 años, comprometió ofrecer servicio
de calidad en la entrega del vital líquido a hogares y empresas.
La oferta más
tentadora fue que invertirían, de entrada, recursos propios por 10
mil millones de pesos. Una parte para liquidar a trabajadores sindicalizados
cuyos salarios elevados y prestaciones ahorcaban la economía del Sistema,
y la otra sería utilizada en rehabilitar la red hidráulica inservible con 50
años de servicio.
Todo resultó
un engaño.
La licitación
pública LPI-SAS-DAF-001/15 publicada por el Ayuntamiento de Veracruz el 18 de
febrero de 2015, exigía la selección de un socio inversionista operador de
reconocido prestigio y solvencia, que aportara experiencia y recursos
financieros suficientes para la realización de un programa de inversión a largo
plazo.
Cuatro meses
después, el 6 de junio, el alcalde jarocho Ramón Poo Gil, informó que la
concesión sería entregada a la Empresa Mixta Grupo Metropolitano (MAS)
integrada por Aguas de Barcelona y Odebrecht Ambiental S. A.
Ni solvencia
moral ni prestigio:
Marcelo
Odebrecht, presunto nuevo dueño del SAS de Veracruz resultó un pillo de
grandes vuelos. El 19 de junio, 13 días después que Poo Gil oficializara
entrega de la concesión, la policía de su país lo detuvo acusado de cometer
actos de soborno y corrupción en la paraestatal PETROBRAS.
Y lo más
vergonzante:
El 21 de
agosto, cuando Odebrecht estaba ya en prisión sin derecho a libertad
condicional, el pastor Juan Nicolás Callejas Arroyo y su rebaño de diputados
del Congreso local avaló la entrega de SAS por 30 largos años.
Tampoco
dinero para invertir.
A casi un año
de distancia, Grupo MAS no ha invertido un solo peso de los 10 mil que
prometió.
¿Por qué?
Están en
quiebra, no tienen dinero.
Con mañas que
sólo se le conocen al ex gobernador Herrera Beltrán, desde el primer día de
recibida la concesión, han buscado firmar contrato con SAS para usarlo como
aval para solicitar créditos a la banca privada.
Es decir:
Los
inversionistas brasileños resultaron un fraude, carecen de liquidez para estar
al frente de la administración del SAS y rescatarlo del fango económico que
enfrenta.
Sin embargo.
Por órdenes
de Fidel y seguramente de Javier Duarte, la concesión no ha sido revocada a
Odebrecht.
¿Por qué?
Simplemente
porque el empresario brasileño es otro de los muchos prestanombres de Herrera
Beltrán para continuar robándose el dinero de los veracruzanos.
SAS es de
Fidel Herrera, de nadie más.
¿O usted qué
pina?
PD. YA SALIÓ
EL PEINE…Fuentes de Inteligencia y de muy alto nivel, han revelado que el
licenciado Benjamín Mandujano, alto funcionario de la PGR, es quien está al
servicio de los señores gobernadores, que tienen sendos expedientes penales y
que son informados a detalle, los pasos que la dependencia federal de la procuración
de justicia, le sigue a connotados mandatarios y ex mandatarios, sobre información
confidencial y que se resguarda en secrecía…A eso se debe, que la PGR no da
una, sobre las denuncias penales en contra de gobernadores, que están señalados
por actos de corrupción y lavado de dinero…como usted recordará don Benjamín es
hermano de René Mandujado, que estuvo privado de su libertad, por actos de
corrupción en aquella llamada Operación Limpieza, del gobierno del presidente
Calderón…hay por ahí un conocido Ministro de la Corte, que sabe mucho del
historial de estos hermanos…
-NOTICIERO y
Análisis político de David Varona Fuentes en #BUENOSDIASVERACRUZ – en vivo-
11:15am Por:
PUNTA DE
LANZA.
LOS
DELINCUENTES DEL PERIODISMO.
Conocidos
mercenarios de los medios de comunicación de Veracruz que apenas ayer desataron
campañas de carnicería en su contra, buscan desesperados encontrar contacto
directo que los lleve y acerque al gobernador electo, Miguel Ángel Yunes
Linares.
Dueños de
editoriales en Xalapa, Veracruz, Tuxpan, Poza Rica y Coatzacoalcos, ruegan a
amistades de Yunes Linares, consigan cita urgente con él.
Andan
espantados. El mandatario electo ya lanzó su espada en prenda al hacer públicos
los adeudos millonarios que el gobierno saliente tiene precisamente con esos
editores, multimillonarios por los “regalos” publicitarios recibidos, primero
de parte de Fidel y luego de Javier.
Pero ni los
millones que esconden en bancos extranjeros les quita la angustia a esos
tiburones de la información, los deprime el futuro incierto que vislumbran
llegar a partir del 1 de diciembre.
Ha
trascendido que el próximo gobierno estatal no pagará un solo peso que adeude
Duarte a esos ex poderosos editores. Y que además revisará también cada peso
que facturado en los últimos 12 años.
Por ello, ya
se habla de fugas masivas al exilio, y en consecuencia
desaparecen muchos panfletos que cobraban como grandes y
prestigiados diarios nacionales.
Cosas de la política
y de los políticos….
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