BUENOS DIAS
VERACRUZ
David Varona
Fuentes
Martes 7 de
abril del 2015.
No es
vacilada, inventos ni calenturas ajenas.
Grupos
especiales de la Procuraduría General de la República se encuentran en
territorio veracruzano.
Siguen los
pasos a connotados ex servidores públicos del Estado de Veracruz. Y también a
otros funcionarios que despachan en dependencias diferentes a las que
cometieron presuntos ilícitos de responsabilidad federal.
Aquí en este
espacio lo hemos venido anunciando.
Desde octubre
de 2014… sabíamos que un juez de la ciudad de México había obsequiado decenas
de órdenes de aprehensión solicitadas por la PGR.
Hasta el
pasado mes de febrero se contabilizaban 21 el número de arrestos que
cumplimentaría la PGR por mandato judicial.
En esas
fechas…
Las
desviaciones de dinero o irregularidades, como quiera llamársele, sumaban 20
mil 583 millones de pesos, de los ejercicios 2010, 2011 y 2012, según lo
determinaron una veintena de revisiones efectuadas por la Auditoría
Superior de la Federación.
Entre otras,
las dependencias con presunto quebranto financiero, eran:
-La
Secretaría de Finanzas, con un déficit de 843 millones de pesos, cuando la
SEFIPLAN estuvo en manos de Tomás Ruiz González, Fernando Charleston y el recién
destituido Mauricio Audirac Murillo.
La Secretaría
de Educación, que venía arrastrando ilícitos desde el último año de la
titularidad de Víctor Arredondo Álvarez y que continuaron con Adolfo Mota
Hernández, (hoy flamante candidato del PRI a la diputación federal por el
distrito de Xalapa Rural) hasta sumar un total de 6 mil 600 millones de pesos.
La Secretaría
de Salud, con desfalcos desde el último año del mandato fidelista por más de 3
mil millones de pesos, que continuaron con el primer secretario de la
prosperidad Pablo Anaya Rivera, a quien inicialmente en 2011 la ASF detectó
irregularidades por más de 172 millones en los recursos del Seguro Popular y de
las cuotas patronales destinadas al ISSSTE. Más lo que se acumuló con el
sucesor Juan Antonio Nemi.
En la
Secretaría de Seguridad Pública, la autoridad federal encontró inconsistencias
de 258 millones de pesos en 2011, 58 millones 500 mil pesos en 2012 y de 348
millones en 2013.
Un total de 764 millones 751 pesos.
Y el saqueo
descarado por otros 4 mil millones pesos en la Secretaría de Desarrollo
Agropecuario Rural y Pesquero, bajo la responsabilidad de Manuel Emilio
Martínez de Leo, quien entre tantas pillerías destaca el desvío de cantidades
millonarias que supuestamente eran utilizadas en financiamiento de proyectos
productivos de ganaderos y agricultores veracruzanos. Pero todos esos recursos
terminaban en su rancho ubicado el sur del estado, con tecnología de punta en
riego y engorda de ganado suizo y alemán.
A todas las
inconsistencias de 2010, 2011 y 2012, todavía la ASF incrementaría las de 2013,
dadas a conocer semanas atrás y que según los números del auditor federal es
del orden de los 28 mil millones de pesos.
Hay que
decirlo:
Misteriosamente,
por “órdenes supriores” las acciones legales para llevar ante la justicia a los
responsables se quedaron en el camino, con la condicionante de que las
anomalías serían solventadas o en su caso, los recursos faltantes reintegrados
a la federación.
Al parecer,
sí hubo devoluciones, comprobaciones, sustituciones y demás con tal de
comprobar el destino de los primeros 20 mil 583 millones de pesos.
Pero no del
total del presunto faltante.
Hasta el 29
de febrero continuaban haciendo falta más de 6 mil millones de pesos.
Y el tiempo
para librarla se acabó.
Los delitos
son:
Peculado,
incumplimiento de un deber legal y asociación delictuosa.
Responsables:
algunos de la herencia maldita que dejó a Veracruz en la peor catástrofe
financiera y de seguridad pública de su historia. Otros del régimen de la
prosperidad que se dedicaron a saquear las arcas estatales traicionando la
confianza del gobernador Javier Duarte.
Ya no está
Jesús Murillo Karam para seguir escondiendo en el cajón las respectivas órdenes
de aprehensión.
La nueva
procuradora Arely Gómez y la Auditoría Superior de la Federación, tienen la
mira puesta en Veracruz.
Claro, no se
disparan solos. Si actúan es porque desde Los Pinos reciben instrucciones.
Por lo
pronto, desde el 31 de marzo creció la demanda de amparos en Veracruz.
Por razones
de secrecía guardamos los nombres de connotados fidelistas y duartistas, que
son vigilados estrechamente sus domicilios y los lugares que acostumbran
llegar.
Las fuentes
de alta confiabilidad, nos solicitaron no alertar a los protagonistas de este
nuevo episodio de corrupción gubernamental, toda vez, que de un momento a otro
la acción de la justicia, se reflejará en territorio veracruzano, en pleno
proceso electoral.
¿O usted qué
opina?
PD. Bajo la
batuta del corrupto y traidor Alfredo Ferrari, el PRI en Veracruz va directo a
la peor debacle electoral de su historia…si saben contar, que no cuenten con el
famoso carro completo…
PUNTA DE
LANZA…
Y NO QUE LAS
DÁDIVAS ESTABAN PROHIBIDAS...
Diversos
candidatos del PRI, como Elizabeth Morales, Adolfo Mota, Anilú Ingram y
Carolina Gudiño, por mencionar unos cuantos, se pasan por el arco del triunfo
las prohibiciones del INE y que son delitos que se pagan cárcel.
A los del
tricolor les vale. Protegidos por las sombras de las noches los operadores de
los abanderados del tricolor andan dedicados a la entrega de despensas y
láminas en las colonias populares de sus respectivos distritos electorales.
Y la peor
burla:
En pleno
inicio de actividad proselitista, el domingo anterior, entregaron 200 pesos a
cada persona que asistió a sus eventos.
Mientras
tanto, el presidente del CDE del PRI, el corrupto Alfredo Ferrari,
asegura que sus candidatos son los mejores posesionados y que por lo tanto no
hacen caso a las denuncias de sus adversarios, no se distraen en tonterías
porque ellos están dedicados en llevar sus propuestas a la gente, que tienen
mucho que decirle a los veracruzanos.
¿Y…qué
tendrán que decirle al electorado?
Que gracias
al presidente Enrique Peña Nieto, el príista número uno del país, México se
encuentra paralizado y en desgracia económica, política y social. O le contarán
el caso de la Casita Blanca de Lomas del Pedregal, hoy con un valor superior a
los 90 millones de pesos.
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