LA TRAGEDIA DE LOS CAÑEROS.

BUENOS DÍAS VERACRUZ
David Varona Fuentes
Martes 17 de septiembre del 2013.


Es pan de cada día a lo largo y ancho del país.
A cada familia cañera nacional, le acompañan historias verdaderas de miseria, tristeza y desolación.
Siempre ocasionadas por el olvido gubernamental, la corrupción y las componendas de sus líderes con los gobiernos federal y estatales.
De nueva cuenta, los productores de caña se encuentran en pie de lucha.
Ahora demandan a la Secretaría de Agricultura la liberación del subsidio de 250 pesos por tonelada de caña producida, como paliativo para enfrentar la grave crisis de dinero que hace estragos en sus hogares.
Y para que la cuña apriete en una entidad donde no pasa nada, otra vez son cañeros veracruzanos, originarios de la Cuenca del Papaloapan, los que protestan por el incumplimiento de la SAGARPA.






Más gritos en el desierto.
Apenas el pasado mes de mayo, los cañeros del país se apoderaron de las bodegas de todos los ingenios de la República Mexicana para impedir la salida y comercialización de azúcar.
Esa ocasión su exigencia fue que el gobierno federal autorizara un mejor precio en la tonelada del endulzante, que por bajo y raquítico lo consideraban un insulto.
Durante varios días los casi 170 mil productores de caña del país, distribuidos en la CNC y en la CNPR,  mantuvieron su demanda de conseguir reajuste en el precio del bulto de azúcar, que de 375 pesos había bajado a 279 pesos.
Como lo hacen siempre, los cañeros aguantaron el movimiento pacífico de toma de bodegas en tanto sus dirigentes “negociaron” costos justos. Cuando recibieron la orden de liberarlas, no se les informó de los alcances obtenidos.
Que sus líderes los usen de “carne de cañón” cuando estos desean obtener prebendas financieras personales, es parte de la desgracia de la familia cañera de México.
Por lo tanto, es innegable que los cañeros del país nunca son portadores de buenas noticias.
Siempre que saltan a la palestra pública, es para denunciar el abandono y la desgracia social que enfrentan, originada por el entreguismo de sus representantes.
Cada vez que los cañeros mexicanos salen a las calles, es para protestar por los abusos oficiales de los que históricamente son víctimas.
Jamás los productores de la gramínea, se dejan ver para agradecer y manifestar alegría y regocijo por alguna conquista sindical obtenida en beneficio de las familias cañeras de la República Mexicana.
Eso sí, mientras los cañeros nacionales viven en medio de la tragedia económica, sus líderes  disfrutan de la riqueza acumulada, saqueada de las cuotas gremiales, u obtenida de la complicidad con autoridades federales o estatales.
Los dirigentes nacionales Daniel Pérez Valdez, de la Confederación Nacional de Productores de Caña de Azúcar de la CNC, y Carlos Blackaller Ayala, de la CNPR,  ni sudan ni se acongojan con las carencias y sufrimientos de sus agremiados.
No es para menos.
Ellos no conocen la miseria; son multimillonarios, inmensamente ricos gracias a los “ahorros” logrados en sus cacicazgos cañeros; su tren de vida son la opulencia económica, los lujos, el despilfarro y el enriquecimiento ilícito.
Y en el campo mexicano, ni quien amenace sus parcelas de poder político y económico.
El gobierno de la república en tiempos del peñismo, también seguirá protegiéndolos con el manto de la impunidad.
Al igual que lo hace con líderes charros como Carlos Romero Deschamps, del Sindicato de Trabajadores Petrolero y Víctor Félix Flores Morales, de los ferrocarrileros, entre otros.
 Que sea por dios y que venga más.
¿O usted qué opina?

PD. Se dice, se especula y se comenta que el operativo del desalojo de los maestros del zócalo de la ciudad de México; estuvo tras bambalinas el general Oscar Naranjo.

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PUNTA DE LANZA…
EL HALCONAZO DE MARLON

Es decir; que fue el flamante subsecretario de Gobierno, el carvallista Marlon Ramirez, -el mismo que como alto funcionario del Congreso estatal exigía a sedicentes líderes de colonias del puerto jarocho, amigos de él, diezmos de 50 y 100 mil pesos para autorizar liberación de escrituras-, el que ordenó a la policía echar de la Plaza a los maestros.
La fuerza brutal era innecesaria; los malos negociadores del gobierno estatal, ha puesto en el ojo del huracán al gobernador Javier Duarte.
Lamentablemente en estos momentos el estado de Veracruz, sufre nuevamente la tragedia de los fenómenos ciclónicos, por lo menos cincuenta municipios, se encuentran en alerta, por los desbordamientos de ríos en la zona norte del estado.
Esta circunstancia de dolor para la gente que ha perdido todo; prácticamente el desalojo de los maestros en la Plaza Lerdo, ha pasado a segundo término. Aún que los maestros de la Coordinadora, ya anunciaron paro nacional a partir del próximo  miércoles, al parecer en el estado se reanudarán clases en todos los niveles.   
Ya habrá tiempo para que el doctor Duarte, vaya pensando muy seriamente que Marlon como Subsecretario…es un cero a la izquierda.