BUENOS DÍAS VERACRUZ
Por: Eva Varona
3 marzo 2012
Los candidatos a la presidencia acumulan fans y seguidores; sus estrategias buscan la manera de convertir esos apoyos virtuales en votos el próximo primero de julio.
Ya todos los aspirantes presidenciales han incursionado en Twitter, Facebook y Youtube.
La apuesta es a dos principales razones: persuadir a los usuarios para que se definan a favor de su proyecto y suavizar a los simpatizantes duros y a su vez hagan campaña a favor o en contra de sus adversarios.
Así que la famosa veda electoral viene valiendo un cáchuate; porque muy a pesar del IFE no pueden regular internet y con ella las redes sociales.
Aquí no se trata de “Ciberterrorismo” sino de que tanto Twitter y Facebook nacieron, son y seguirán sirviendo para un motivo: expresiones personales y esas son herramientas que aprovechan los aspirantes.
Lo que sí es verdad es que ya no es un instrumento de ocio, las estadísticas son muy interesantes:
Del 1° de Noviembre al 10 de febrero su público ha crecido exponencialmente: Josefina Vazquez Mota triplicó a sus seguidores en Twitter y duplicó los de Facebook.
Enrique Peña Nieto quien no tenía cuenta de Twitter hasta antes del 17 de noviembre pasado, ahora es seguido por más de 413 mil personas, y sus fans en Facebook crecieron 35%.
Andrés Manuel López Obrador creció 160% en Twitter y 44 % en Facebook.
Pero no todo es color de rosa; la difamación y el descredito fluctúan tan volublemente en Twitter como en Facebook, ningún analista se atreve a pronosticar resultados que reflejan comportamientos tan erráticos, como los que se manifiestan en las redes sociales.
Según especialistas como Guillermo Perez Bolde Vicepresidente de MKT de AMIPCI, nos dice que internet no será un mercado digital de ideas 2.0, sino el lugar donde se desatarán las batallas que en estrategia de quienes las echan a andar, buscarán llegar a los medios tradicionales una vez que exploten en la red.
lavaronita@hotmail.com
www.lavaronita@hotmail.com
www.lagazeta.org
Por: Eva Varona
3 marzo 2012
Los candidatos a la presidencia acumulan fans y seguidores; sus estrategias buscan la manera de convertir esos apoyos virtuales en votos el próximo primero de julio.
Ya todos los aspirantes presidenciales han incursionado en Twitter, Facebook y Youtube.
La apuesta es a dos principales razones: persuadir a los usuarios para que se definan a favor de su proyecto y suavizar a los simpatizantes duros y a su vez hagan campaña a favor o en contra de sus adversarios.
Así que la famosa veda electoral viene valiendo un cáchuate; porque muy a pesar del IFE no pueden regular internet y con ella las redes sociales.
Aquí no se trata de “Ciberterrorismo” sino de que tanto Twitter y Facebook nacieron, son y seguirán sirviendo para un motivo: expresiones personales y esas son herramientas que aprovechan los aspirantes.
Lo que sí es verdad es que ya no es un instrumento de ocio, las estadísticas son muy interesantes:
Del 1° de Noviembre al 10 de febrero su público ha crecido exponencialmente: Josefina Vazquez Mota triplicó a sus seguidores en Twitter y duplicó los de Facebook.
Enrique Peña Nieto quien no tenía cuenta de Twitter hasta antes del 17 de noviembre pasado, ahora es seguido por más de 413 mil personas, y sus fans en Facebook crecieron 35%.
Andrés Manuel López Obrador creció 160% en Twitter y 44 % en Facebook.
Pero no todo es color de rosa; la difamación y el descredito fluctúan tan volublemente en Twitter como en Facebook, ningún analista se atreve a pronosticar resultados que reflejan comportamientos tan erráticos, como los que se manifiestan en las redes sociales.
Según especialistas como Guillermo Perez Bolde Vicepresidente de MKT de AMIPCI, nos dice que internet no será un mercado digital de ideas 2.0, sino el lugar donde se desatarán las batallas que en estrategia de quienes las echan a andar, buscarán llegar a los medios tradicionales una vez que exploten en la red.
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