BUENOS DÍAS
VERACRUZ
David Varona
Fuentes
Jueves 22 de
mayo del 2014
Ha convertido
multimillonarios a políticos, empresarios y dirigentes sindicales.
Ellos sí han
sabido sacarle jugo a la recolección de los residuos ciudadanos en hogares,
empresas, restaurantes, oficinas, y demás.
Algunos desde
la comodidad de un cargo público; otros gracias a las componendas con el poder,
unos más explotando a los trabajadores de la limpia pública municipal.
A todos
los identifica un común denominador:
Se convierten
en empresarios del transporte de la basura en cada municipio de la entidad que,
a mayor número de habitantes, más carros recolectores y por lógica financiera
mayores son las ganancias.
La basura
siempre ha sido negocio redondo.
Antes era
sólo para unos cuantos, principalmente para el presidente municipal en
turno y sus cuadernos de doble rayas.
Síndicos,
regidores y el director de área, aguantaban vara.
Sin embargo
la avaricia fue apoderándose de los demás integrantes del cabildo que
sorprendidos veían cómo el alcalde y sus amigos, de la noche a la mañana,
compraban una, dos, tres, cinco y hasta diez camiones para recoger la basura de
las calles del pueblo o la ciudad.
Siempre he
dicho que en la vida hay dos cosas que no pueden ocultarse: lo rico y lo
pendejo. Y lo primero siempre traiciona al servidor público que nunca ha tenido
nada, ni siquiera dónde caerse muerto. Verse de pronto, con dinero y poder,
rodeado de lujos y bellas edecanes, loco se vuelve.
Por lo
anterior, cuando en una camarilla o banda de ladrones de siete suelas, (como
suelen llamar a los políticos) unos enriquecen, los demás exigen parte
del botín.
Y eso ocurrió
con la basura.
Por las
complicidades, el negocio fue compartiéndose.
Los
dirigentes de los sindicatos de trabajadores de la limpia pública municipal no
se quedaron atrás…
También
demandaron su rebanada del pastel, so pena de levantarse en huelga o
denunciar los abusos del alcalde si éste no les abría las puertas de la transa.
En los
principales ayuntamientos de la entidad que recolectan diariamente entre 10 y
50 toneladas de desechos públicos, los políticos tienen sus cotos de
poder financiero en el delicioso manjar de la basura.
Todos tienen
nombres y apellidos y pertenecen al PRI, al PAN, al PRD.
Y todos están
hasta las manitas por tráfico de influencias en el comercio de la basura.
Porque el
motivo del tema de este comentario tiene su origen en la zona conurbada
Veracruz-Boca del Río, lo ilustraré con un ejemplo.
En el
municipio jarocho políticos camaleónicos como Julio Saldaña Morán, ex regidor y
dos veces candidato perdedor a la alcaldía, y el actual diputado plurinominal
del PRI Antonino Baxi Mata, zar del sindicato de la basura, son dueños de
decenas de carros que recogen la basura.
Desde
administraciones edilicias pasadas, estos vivales cobran cada mes, libres de
paja y polvo, de 10 a 20 millones de pesos por el “servicio” que
prestan.
Durante años,
quizás desde el alcalde priísta Efrén López Meza, la basura ha venido
siendo lucro misterioso y secreto para unos cuantos.
Pareciera que
la jettatura del silencio se ha roto:
En Boca del
Río, un escándalo de presuntas transacciones ilícitas amenazas a la
actual administración municipal, de siglas azules.
Y quien ha
puesto en evidencia la honestidad y transparencia que grita a los cuatro
vientos el actual alcalde panista Miguel Ángel Yunes Márquez, es su propio ex
compañero de partido, José Ramón Gutiérrez de Velasco, mejor conocido como
“José-ratón”, por aquello del saqueo a las arcas jarochas cuando fue presidente
municipal (2001-2004).
En cumplimiento
al ordenamiento del IVAI, Gutiérrez de Velasco exige a Yunes información de a
qué empresa entregó el contrato de la recolección de la basura en aquel
municipio. Dice la también conocida como la “Joserra”, que sospecha que detrás
del arrendamiento de 15 carros recolectores de basura a una empresa de la
ciudad de México hay un negocio familiar con ganancias mensuales de 7 millones
de pesos, en virtud de que no hubo licitación pública.
Sin aparente
preocupación Yunes Márquez tildó al legislador priísta de
“pobrecito y ridículo”.
Cierto
es que, por su pasado tenebroso como alcalde de Veracruz, Gutiérrez de Velasco
sea el menos indicado para tratar asuntos de honestidad en aplicación de
recursos públicos. Recuérdese que por asuntos relacionados también con la
basura mantuvo pleito a muerte con el empresario Rafael Fuster, en aquel tiempo
prestador del servicio de limpia pública y a quien el “José-ratón”, se negaba a
pagarle alrededor de 5 millones de pesos.
Sin embargo,
quien nada debe, nada teme.
¿Por qué
entonces la molestia del primogénito ante tal petición de transparencia?
¿O usted qué
opina?
PD. Alberto Silva
Ramos de vocero del gobierno estatal; se ha convertido en el asesor de cabecera
del gobernador Duarte; el novel político tuxpeño tiene toda la confianza de su
jefe, porque se ha convertido en centinela sin relevo, en los momentos críticos
y difíciles, Beto es entrón y está echado para adelante.
PUNTA DE
LANZA…
NUEVOS
RUMBOS.
El gobernador
Javier Duarte está dando muestras de los cambios reales que busca
inyectarle a su gobierno para que estos terminen en resultados para Veracruz.
El trabajo de búsqueda de la Procuraduría de Justicia para dar con el paradero
de decenas de veracruzanos que habían sido levantados o secuestrados por bandas
del crimen organizado, es una muestra palpable que el mandatario estatal se ha
propuesto darle otro rostro a su administración, apretando a todos los colaboradores
que durante su mandato se la pasaron echando la hueva o sirviendo a otros
intereses ajenos y perversos. Tiene el doctor tiempo suficiente para corregir
errores del pasado y transitar en caballo de hacienda el camino que resta, que
será prioritario para consumar el proyecto político que comparte con Los Pinos.
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Nada que
ver con los bufones que viven del halago desmedido…
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