BUENOS DÍAS
VERACRUZ
David Varona
Fuentes
Jueves 20 de
noviembre del 2014
Ni
estabilidad, ni proyecto de nación.
Durante los
casi dos años de administración del presidente Enrique Peña Nieto, el país
navega sin brújula, no tiene rumbo ni dirección.
La realidad
no puede ocultarse.
México está
paralizado. No hay crecimiento económico, el desempleo nacional galopa en
caballo de hacienda, la inseguridad pública espanta a inversionistas
extranjeros y capitales golondrinos escapan del país desde la crisis de
Ayotzinapa.
Analistas
financieros internacionales no observan visos de mejoría a corto plazo en
la economía mexicana. Aseguran que este año el Producto Interno Bruto, al igual
que en 2013, será inferior al 2.5 por ciento.
Considerando
lo anterior.
El escenario
político, social y económico del país continúa siendo desastroso, incierto y
desolador. No se ve mejoría con el retorno del Partido Revolucionario
Institucional a la Presidencia de la República.
Han sumado ya
casi 24 meses de pruebas y experimentos de un presidente que, como candidato,
prometió a los mexicanos las perlas de la Virgen.
Por lo tanto…
Si no hay
avances sustanciales en la economía nacional que reflejen beneficios palpables
y sonantes a la población… no existe proyecto de nación que tanto cacaraquea el
discurso de Los Pinos.
Y no puede
atentarse contra lo invisible o inexistente.
Las reformas
en materia educativa, laboral, fiscal, política, energética y en
telecomunicaciones, alcanzadas por el gobierno peñista a base de cañonazos
millonarios entregados a dirigentes partidistas opositores al PRI, (según
denunció el legislador de Movimiento Ciudadano Ricardo Monreal) fueron flor de
unos cuantos meses.
No extraña:
Los cambios
constitucionales estuvieron siempre prendidos de alfileres. Llegó el primer
tsunami político-criminal y las derribó.
Las
declaraciones nada oportunas de Peña Nieto repartiendo culpas y fabricando
responsables en la masacre de los normalistas y en los escándalos generados por
la Casa Blanca de 87 millones de pesos propiedad de la pareja presidencial, en
nada ayudan a “levantar” su deteriorada imagen como mandatario mexicano.
El presidente
manda señales de desesperación, de sentirse acorralado
Tira la bola
y esconde la mano.
En su
discurso del martes en Cuautitlán, afirmó que las protestas y
manifestaciones salpicadas de violencia suscitadas en los últimos días, “no
tienen objetivo claro”. Y que lo mismo sucede con las publicaciones
periodísticas referentes a la Casa Blanca, escriturada a nombre de su
contratista preferido cuando fue gobernador del estado de México…
Acusó:
-“Pareciera
que responden a un interés por generar desestabilización, desorden y atentar
contra el proyecto de nación que hemos venido impulsando”.
“No hay peor
ciego que el que no quiere ve…”, reza el adagio popular.
Es indudable
que los asesores, encabezados por el ex gobernador Miguel Alemán Velasco, están
engañando al presidente.
Muy aparte de
que su séquito de operadores políticos y especialistas en seguridad nacional,
se anotaron fracaso rotundo con el caso Ayotzinapa.
Es importante
destacar…
Que mientras
don Enrique busca salvarse del escrutinio público, los dos principales grupos
que se repartieron el poder y el control del gabinete presidencial, se
encuentran de plácemes.
Disfrutan que
el presidente se desmorone.
Y sabedores
de su enfermedad terminal de la que hemos venido informando oportunamente.
Y ni quién
salga en auxilio o ayuda del ejecutivo federal.
Sus
hacedores, Arturo Montiel en la gubernatura mexiquense, y Carlos Salinas de
Gortari en la presidencia de la República, convalecen, reposan, después de
luchar contra la muerte.
Nada parece
salvar a Peña…
¿O usted qué
opina?
PD. Este
miércoles en las oficinas personales del secretario de Gobernación Osorio Chong
en Díaz Mirón y Reforma; comieron amenamente por el espacio de tres horas, el
hidalguense y el Presidente del Instituto Nacional Electoral doctor Lorenzo
Córdoba.
Se habló
largo y tendido sobre el próximo proceso electoral del 2015; de los partidos
políticos, pero, sobre todo quedó perfectamente claro que los que sean
candidatos deberán pasar los exámenes de confiabilidad e investigar
cuidadosamente a hombres y mujeres, que sean postulados.
Osorio Chong
en estos días turbulentos, ha venido cabildeando con diputados y senadores de
los distintos partidos políticos, haciendo amarres y alianzas con gobernadores
para hacer un solo frente, ante los cambios que se vislumbran en los días por
venir.
En el
gabinete hay zozobra e incertidumbre, existen informes de muy alto nivel, que
el presidente tomará una decisión no contemplada…
PUNTA DE
LANZA…
ASPIRANTES EN
EL FILO DE LA NAVAJA.
El acaudalado
y multimillonario secretario de Gobierno, Erick Alejandro Lagos Hernández, no
es brujo ni nada parecido, pero presiente que la suerte amenaza con darle la
espalda en las semanas o meses por venir.
Quienes lo
conocen de años atrás, cuentan que al joven político fidelista se le observa
preocupado, distante, tratando de adivinar la mala jugada que le tiene
preparado el destino. Maldita la hora que inventaron que el CISEN investigue la
“honorabilidad” de quienes serán en 2015 los candidatos del PRI a puestos de
elección popular. Por su cercanía estrecha con el ex gobernador Fidel Herrera,
se encuentra en la mira.
Sus sueños de
alcanzar fuero constitucional a través de la diputación federal, están
cayéndose a pedazos.
En el Consejo
estatal de su partido, la propia Elizabeth Morales ha sido muy clara en el
sentido, de escoger a los mejores candidatos y candidatas del tricolor, que
sean personas honorables, honestas y que no tengas nexos con las bandas del
crimen organizado.
La línea
tirada por el primer priísta Javier Duarte ha sido muy clara; serán candidatos
quienes verdaderamente pasen el filtro y el examen de confiabilidad…luego
entonces Lagos, Carvallo, Spinoso y Motita, deben darse por descontados, hay mucha
tela de dónde cortar, en el momento oportuno saldrán a relucir copias de los
expedientes rezagados en los cajones de la PGR.
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