domingo, 23 de marzo de 2008

DOÑA CAROLINA SABE MONTAR...

Pobres diputados de la Fidelidad.
Ante se les consideraba ignorantes y sumisos, ahora hasta les gusta verse ridículos.
Y todo por esa rara enfermedad de buscar quedar bien con el gobernador Fidel Herrera Beltrán.
Hemos visto que el mandatario veracruzano cada vez que puede muestra sus dotes de buen jinete.
Principalmente en las cabalgatas anuales de las tres Huastecas, donde por largas horas suele montar ejemplares pura sangre, cuarto de millas, propiedad de amigos suyos de aquella zona… Siempre acompañado de sus homólogos de Hidalgo y San Luis Potosí.
Y como nunca faltan los arrastrados, ya salieron algunos colaboradores y diputados que buscan copiarle sus hábitos.
Quienes lejos de lucirse, sólo rayan en la ridiculez pública.
Y no es para menos.
Carecen de experiencia en el manejo de briosos corceles, pero aún así los montan para emular al joven Fidel, de quien esperan les hable felicitándolos por su exhibición.
Ver a la legisladora Luz Carolina Gudiño Corro, arriba de un caballo recorriendo las playas del puerto jarocho, fue motivo de burlas y risas de los cientos de turistas que abarrotaban esas áreas recreativas.
Saludando y entregando a los visitantes sombrillas del color que late con fuerza, la presidenta del Congreso Local, fue el hazme-reir de los vacacionistas, quienes, luego de controlar las ganas del chis, preguntaban quién era esa payasa que montaba caballo.
Nadie duda que el objetivo de dicha cabalgata a orillas del mar de la señora Gudiño, fue el de promover las aspiraciones presidenciales de la Fidelidad en el 2012.
Aprovechando que con motivo del periodo vacacional de Semana Santa, se encuentran en Veracruz cientos de miles de vecinos de los estados de México, Puebla, Hidalgo, Tabasco, Oaxaca, Tamaulipas y el Distrito Federal, que representan un fuerte caudal de votos del padrón nacional.
Conociendo el entreguismo de la diputada Gudiño a las causas fidelistas, es por demás especular quién le dio la orden de hacerle a la jineteada en éstos días de asueto, precisamente en el corazón del centro de reunión, como son las playas veracruzanas.
Algunos ilusos creen que la idea de aparecer montada fue alcance de doña Carolina, porque quiere ser diputada federal en el 2009 para sacarse la espina que trae adentro de esa dolorosa derrota sufrida en la elección de julio de 2006, ante la panista Vicky Gutiérrez.
Pero se equivocan, Fidel va a cuidarla para la municipal de 2010.
La candidatura federal del próximo año podría ser para Raúl Díaz Diez, un joven fresita que primero, gracias a su oficio de carga-maletas de Fidel se ganó una regiduría en el ayuntamiento de Veracruz en el trienio del no manos limpias Julen Rementería.
Por llevarle las contras en palacio al fracasado empresario del Importador, Díaz se mudó al edificio del PRI estatal, donde tiene el cargo de membrete de Secretario de Organización, porque al igual que el dirigente Pepe Yunes, no se ven, muchos menos se siente su liderazgo.
Lo cierto de todo es que Raúl Díaz Diez, forma parte de esa nueva camada de prospectos políticos que alista el gobernador Herrera.
Algunos ya son diputados locales, como Carolina, José Ruiz Carmona, Raúl Zarrábal, y otros más, de los cuales de todos juntos no se hacen uno solo, que sea digno representante popular.


Cada uno de ellos son diferentes, pero todos buscan lo mismo: “tirársele al piso a quien los manda”.

Pepín Ruiz se la pasa hablándole a los reporteros L.H: para que lo entrevisten, le gusta ser protagonista igual que su patrón.
A Zarrábal, se le observa de cantina en cantina, no importándole las llamadas de Fidel, porque se dice consentido de doña Beatriz Paredes.
Y algunos de los que quieren llegar a San Lázaro el próximo año, andan haciéndole al monje loco entregando apoyos a los necesitados, cuando saben que antes de la elección federal ya están perdidos.
Ese es el caso de Salvador Mansur, el delfín fidelista para Boca del Río, tierra gobernada por los yunes y que defenderán hasta con sus propias vidas por representar el parte-aguas del 2010.
Por el lado político, el subsecretario de finanzas visita las colonias boqueñas sólo porque se lo ordenan, no por deseos propios…no ignora que se enfrenta a una guerra sucia en la que él será la víctima principal.
Por el otro, el del aspecto económico, es el que lo motiva a continuar con su precampaña..
Y no es para menos.
Dicen sus cercanos colaboradores que tiene asignado un fuerte presupuesto de 50 millones de pesos mensuales, para comprar todo lo que los habitantes de las colonias populares necesiten o le pidan.
La idea es que Mansur sea la puya del alcalde chiqui-yunes.
Regalar todo…más y mejor de lo que entregue el presidente de Boca del Río…Si éste construye casitas de cartón, San Salvador edificará pies de casas pero de cemento… Y así por el estilo.
Seguirlo en todo el municipio… desesperarlo y sacarlo de quicio, porque piensa y actúa igual que el padre… esa es la orden que tiene Mansur, a quien por cierto nada le gusta esa chambita proselitista de fines de semana… Y está pensando seriamente en tirar la toalla.
La guerra… todavía no empieza.
¿O usted qué opina?

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