Alegría en unos, caras largas en otros.
Caracterizaron la visita del presidente Calderón ayer al estado de Veracruz.
Mientras el gobernador Fidel Herrera cortó rabo y orejas, recibiendo el reconocimiento público a su trabajo por el primer mandatario de la nación, otros no pudieron ocultar su mal humor por los disturbios suscitados que echaron a perder la gran fiesta preparada.
Uno más, como el diputado federal Gerardo Buganza, tendrá que olvidarse de sus aspiraciones de ser otra vez candidato del PAN al gobierno de Veracruz en el 2010.
El de ayer fue uno de los mejores días de Fidel como gobernador de Veracruz.
Contrario a los agoreros del desastre que pronosticaban barruntos de tempestades durante la visita presidencial al puerto jarocho y a la zona conurbada, todo resultó miel sobre hojuelas para el tío Fide.
Nunca como ayer jueves, se le vio tan contento al joven político de Nopaltepec…su rostro radiaba alegría; saludaba a todos siempre sonriendo…hasta sus más cercanos colaboradores que le han soportado los berrinches malhumorados de los últimos días, se sorprendían de la amabilidad y gentileza con la que se dirigía a ellos.
Fidel estuvo feliz.
Y no era para menos…recibió de Calderón, al menos por ayer, el trato digno que le era regateado desde los inicios del sexenio presidencial, causados tal vez por chismes o envidias al exitoso trabajo que realiza en beneficio del pueblo veracruzano que, hay que reconocerle, ha servido para ganarse la voluntad de las inmensas mayorías.
-“Amor con amor se paga”, le dijo el presidente al corresponder a las atenciones que dice, ha recibido de Veracruz, y por lo cual prometió más obras para la entidad.
Los elogios de Calderón fueron motivo de aplausos y vivas por parte de los integrantes del presidium principal instalado en la explanada del Recinto Portuario con motivo de la inauguración del llamado kilómetro 13 y medio, que comunica en forma directa y exclusiva a la zona portuaria…entre ellos se encontraba el director del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes Linares.
EL ENTIERRO DE BUGANZA
Con más de 90 días anticipados, Gerardo Buganza Salmerón anunció su majestuoso Primer Encuentro Mundial de Negocios, Agropecuarios, Pesqueros y Forestales, a realizarse en el World Trade Center de Boca del Río.
Con inmensos y costosos espectaculares que rentó a un costo de 900 pesos diarios, el cordobés informaba su gran evento del 4 al 10 de agosto de 2008, inauguración que tuvo que posponer tres días para que coincidiera con la gira que el presidente Calderón, su amigo y compañero de partido, realizaría por el puerto de Veracruz y la ciudad de Córdoba.
Buganza preparó tanto su foro internacional, que lo convirtió en una fiesta de halagos personales, al grado de fastidiar a Calderón.
El orador Javier Carreón Cuellar, contratado en exclusiva para exaltar la imagen del diputado panista, tuvo que ser callado por el propio Calderón cuando empezaba a contar historias de cómo había conocido a Buganza…”sea usted breve, por favor”, le pidió el presidente en tono molesto.
Y los mariachis bugancistas callaron.
El que aspira intentar nuevamente ser gobernador del estado, deseó que la tierra se lo tragara…sintió el peso de todas las miradas, principalmente la del huésped de Los Pinos, de quien vocifera, es “mi amigo”.
Para todos los reunidos en el WTC, Buganza escribió ayer su epitafio, al menos por el resto del gobierno calderonista.
PROTESTAS LE AGUARON LA FIESTA A YUNES
Sin lugar a dudas, el de ayer, no fue el gran día que Miguel Ángel Yunes Linares deseaba tener frente a su jefe máximo Felipe Calderón.
Antes de la inauguración de la clínica en el fraccionamiento El Coyol, se presentaron disturbios entre elementos del Estado Mayor Presidencial y vecinos de la unidad habitacional, quienes deseaban protestar ante Calderón por presuntas afecciones que sufrieron con la construcción de la unidad médica.
Al parecer hubo varios lesionados.
Yunes Linares fue informado del enfrentamiento minutos antes del evento inaugurativo, y en esos momentos terminó su alegría.
Y todavía como pilón tuvo que ser testigo de las quejas que recibió Calderón por parte de jubilados, que exigieron que primero se atienda el desabasto de medicinas en el ISSSTE, y luego se construyan más hospitales.
Era tal su ira contenida, que el discurso del choleño se escuchó frío y desangelado.
El día de buena suerte para Fidel al lado del ejecutivo federal, continuó en Córdoba.
Sin embargo, Fidel necesitará de muchos días cómo éstos…no puede empezar a tronar cuetes…el camino se muestra escabroso.
¿O usted qué opina?
Caracterizaron la visita del presidente Calderón ayer al estado de Veracruz.
Mientras el gobernador Fidel Herrera cortó rabo y orejas, recibiendo el reconocimiento público a su trabajo por el primer mandatario de la nación, otros no pudieron ocultar su mal humor por los disturbios suscitados que echaron a perder la gran fiesta preparada.
Uno más, como el diputado federal Gerardo Buganza, tendrá que olvidarse de sus aspiraciones de ser otra vez candidato del PAN al gobierno de Veracruz en el 2010.
El de ayer fue uno de los mejores días de Fidel como gobernador de Veracruz.
Contrario a los agoreros del desastre que pronosticaban barruntos de tempestades durante la visita presidencial al puerto jarocho y a la zona conurbada, todo resultó miel sobre hojuelas para el tío Fide.
Nunca como ayer jueves, se le vio tan contento al joven político de Nopaltepec…su rostro radiaba alegría; saludaba a todos siempre sonriendo…hasta sus más cercanos colaboradores que le han soportado los berrinches malhumorados de los últimos días, se sorprendían de la amabilidad y gentileza con la que se dirigía a ellos.
Fidel estuvo feliz.
Y no era para menos…recibió de Calderón, al menos por ayer, el trato digno que le era regateado desde los inicios del sexenio presidencial, causados tal vez por chismes o envidias al exitoso trabajo que realiza en beneficio del pueblo veracruzano que, hay que reconocerle, ha servido para ganarse la voluntad de las inmensas mayorías.
-“Amor con amor se paga”, le dijo el presidente al corresponder a las atenciones que dice, ha recibido de Veracruz, y por lo cual prometió más obras para la entidad.
Los elogios de Calderón fueron motivo de aplausos y vivas por parte de los integrantes del presidium principal instalado en la explanada del Recinto Portuario con motivo de la inauguración del llamado kilómetro 13 y medio, que comunica en forma directa y exclusiva a la zona portuaria…entre ellos se encontraba el director del ISSSTE, Miguel Ángel Yunes Linares.
EL ENTIERRO DE BUGANZA
Con más de 90 días anticipados, Gerardo Buganza Salmerón anunció su majestuoso Primer Encuentro Mundial de Negocios, Agropecuarios, Pesqueros y Forestales, a realizarse en el World Trade Center de Boca del Río.
Con inmensos y costosos espectaculares que rentó a un costo de 900 pesos diarios, el cordobés informaba su gran evento del 4 al 10 de agosto de 2008, inauguración que tuvo que posponer tres días para que coincidiera con la gira que el presidente Calderón, su amigo y compañero de partido, realizaría por el puerto de Veracruz y la ciudad de Córdoba.
Buganza preparó tanto su foro internacional, que lo convirtió en una fiesta de halagos personales, al grado de fastidiar a Calderón.
El orador Javier Carreón Cuellar, contratado en exclusiva para exaltar la imagen del diputado panista, tuvo que ser callado por el propio Calderón cuando empezaba a contar historias de cómo había conocido a Buganza…”sea usted breve, por favor”, le pidió el presidente en tono molesto.
Y los mariachis bugancistas callaron.
El que aspira intentar nuevamente ser gobernador del estado, deseó que la tierra se lo tragara…sintió el peso de todas las miradas, principalmente la del huésped de Los Pinos, de quien vocifera, es “mi amigo”.
Para todos los reunidos en el WTC, Buganza escribió ayer su epitafio, al menos por el resto del gobierno calderonista.
PROTESTAS LE AGUARON LA FIESTA A YUNES
Sin lugar a dudas, el de ayer, no fue el gran día que Miguel Ángel Yunes Linares deseaba tener frente a su jefe máximo Felipe Calderón.
Antes de la inauguración de la clínica en el fraccionamiento El Coyol, se presentaron disturbios entre elementos del Estado Mayor Presidencial y vecinos de la unidad habitacional, quienes deseaban protestar ante Calderón por presuntas afecciones que sufrieron con la construcción de la unidad médica.
Al parecer hubo varios lesionados.
Yunes Linares fue informado del enfrentamiento minutos antes del evento inaugurativo, y en esos momentos terminó su alegría.
Y todavía como pilón tuvo que ser testigo de las quejas que recibió Calderón por parte de jubilados, que exigieron que primero se atienda el desabasto de medicinas en el ISSSTE, y luego se construyan más hospitales.
Era tal su ira contenida, que el discurso del choleño se escuchó frío y desangelado.
El día de buena suerte para Fidel al lado del ejecutivo federal, continuó en Córdoba.
Sin embargo, Fidel necesitará de muchos días cómo éstos…no puede empezar a tronar cuetes…el camino se muestra escabroso.
¿O usted qué opina?
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