Y no es para menos.
Quisieran tener ya, en sus manos, los recursos que el gobierno del estado les consiguió por bursatilizar el 20 por ciento del pago de la tenencia vehicular que por ley les corresponde.
Pese a estar advertidos que ese dinero no podrán utiizarlo para gasto corriente que tape su despilfarro en pachangas o viajes de placer con “sus secretarias o asistentes personales”, muchos presidentes municipales se observan ansisoso por la llegada de esa partida extra que nunca esperaron tener.
Aseguran que uno de tantos ediles que cada día se frotan las manos pensando en los millones que recibirá su municipio, es el doctor Jon Rementería, el alcalde del puerto jarocho, de quien por cierto, no se ve ni se siente su trabajo al frente del ayuntamiento que representaba la Joya de La Corona para el Partido Acción Nacional en Veracruz.
De lo único que ha dado de qué hablar la administración del exsecretario de Salud es del pleito de intereses que trae el alcalde con los diputados locales Carolina Gudiño y el Pepín Ruiz Carmona, por la incorporación en la nómina municipal de sus recomendados pilotos aviadores.
Y por supuesto el tema que es la comidilla de todos los días en los pasillos y oficinas del palacio de la ciudad cuatro veces histórica, es el asunto de los grandes negocios familiares que se están haciendo, o al menos los que el gastroenterólogo deja hacer a su cuñado Abelardo, el hermano de su esposa.
Y así como han transcurrido más de diez meses de mandato municipal, dejando ver y pasar en la comuna de Veracruz, en el resto de los ayuntamientos ha sucedido prácticamente lo mismo.
Aún cuando cumplirán su primer año de labores, los alcaldes no terminan de sentarse; no hay obras púbicas de gran envergadura en casi ningún municipio, sea grande , mediano o pequeño; los únicos trabajos con inversiones millonarias que se observan son los que realiza el gobierno Fidelista.
Cabe preguntar entonces…
¿Dónde quedaron los presupuestos de 2008?
¿En qué se lo gastaron los presidentes municipales?
Porque la realidad es que las arcas de muchos ayuntamientos, sean azules, rojos, verdes, verdes o amarillos, se encuentran vacías; no tienen ni siquiera para el pago de los aguinaldos de sus empleados de confianza y el de los trabajadores sindicalizados.
Por ello es que la gran mayoría de los ayuntamientos veracruzanos anunciaron ya el cierre del año fiscal 2008, y pobre de aquel contratista o acreedor cualquiera que se haya dormido y no presentó en tiempo el cobro de sus servicios.
Se quedó chiflando en la loma y tendrá que esperar hasta el otro año para ver su pago.
A no ser que descarados y cínicos que suelen ser las autoridades municopales, ignoren la orden del gobernador Fidel Herrera de no desviar el dinero de la bursatilización en gasto corriente, y lo agarren para aguinaldos y pago de proveedores.
Y no se duda que eso suceda, principalmente porque en los hechos no hay quien vigile con mano dura y apego a la legalidad el dinero del pueblo que manejan los alcaldes, conocidos por esa maña de tomar el cargo público como regalo de lotería, gracias a la complicidad o al valemadrismo de quienes tienen esa encomienda.
Por un lado el desinterés que muestra doña Clara Luz Prieto Villegas en la contraloría estatal; solapa las pillerías y se le ve sin ánimos de aplicar la ley a los ladrones de los ayuntamientos.
Y por el otro, el manto de la complicidad del titular del ORFIS Mauricio Audirac, bien conocido por sus magias para enderezar entuertos financieros y desaparecer adeudos en dependencias públicas, que le dejan jugosas ganancias.
Por esa actuación gris, la contralora del estado camina en el filo de la navaja; el mandatario estatal la tiene en la mira.
Y es que el sueño de la licenciada Prieto Villegas es ser Procuradora de Justicia; a Emeterio López Márquez le puso toneladas de piedras en el camino hasta que lo vio caer. Creyó que ella sería la sucesora. No sería nada extraño que esté haciendo lo mismo con Salvador Mikel, y a eso se deba que el chirinista no de a la fecha los resultados esperados por el gobernador.
En suma, los alcaldes que le entraron al sistema bursátil invitados por el gobernador Fidel Herrera para que lleguen más recursos a sus municipios y no tengan pretextos para no hacer obra social, afilan los dientes.
Para ellos representa sacarse la rifa del tigre.
Pero el gobernador Fidel Herrera y el secretario de Finanzas, doctor Javier Duarte, ya les leyeron la cartilla.
Por lo pronto mañana lunes se firmará con los ayuntamientos el documento de la bursatilización, y una vez más los munícipes escucharán la advertencia del gobierno Fidelista.
¿O usted qué opina?
Quisieran tener ya, en sus manos, los recursos que el gobierno del estado les consiguió por bursatilizar el 20 por ciento del pago de la tenencia vehicular que por ley les corresponde.
Pese a estar advertidos que ese dinero no podrán utiizarlo para gasto corriente que tape su despilfarro en pachangas o viajes de placer con “sus secretarias o asistentes personales”, muchos presidentes municipales se observan ansisoso por la llegada de esa partida extra que nunca esperaron tener.
Aseguran que uno de tantos ediles que cada día se frotan las manos pensando en los millones que recibirá su municipio, es el doctor Jon Rementería, el alcalde del puerto jarocho, de quien por cierto, no se ve ni se siente su trabajo al frente del ayuntamiento que representaba la Joya de La Corona para el Partido Acción Nacional en Veracruz.
De lo único que ha dado de qué hablar la administración del exsecretario de Salud es del pleito de intereses que trae el alcalde con los diputados locales Carolina Gudiño y el Pepín Ruiz Carmona, por la incorporación en la nómina municipal de sus recomendados pilotos aviadores.
Y por supuesto el tema que es la comidilla de todos los días en los pasillos y oficinas del palacio de la ciudad cuatro veces histórica, es el asunto de los grandes negocios familiares que se están haciendo, o al menos los que el gastroenterólogo deja hacer a su cuñado Abelardo, el hermano de su esposa.
Y así como han transcurrido más de diez meses de mandato municipal, dejando ver y pasar en la comuna de Veracruz, en el resto de los ayuntamientos ha sucedido prácticamente lo mismo.
Aún cuando cumplirán su primer año de labores, los alcaldes no terminan de sentarse; no hay obras púbicas de gran envergadura en casi ningún municipio, sea grande , mediano o pequeño; los únicos trabajos con inversiones millonarias que se observan son los que realiza el gobierno Fidelista.
Cabe preguntar entonces…
¿Dónde quedaron los presupuestos de 2008?
¿En qué se lo gastaron los presidentes municipales?
Porque la realidad es que las arcas de muchos ayuntamientos, sean azules, rojos, verdes, verdes o amarillos, se encuentran vacías; no tienen ni siquiera para el pago de los aguinaldos de sus empleados de confianza y el de los trabajadores sindicalizados.
Por ello es que la gran mayoría de los ayuntamientos veracruzanos anunciaron ya el cierre del año fiscal 2008, y pobre de aquel contratista o acreedor cualquiera que se haya dormido y no presentó en tiempo el cobro de sus servicios.
Se quedó chiflando en la loma y tendrá que esperar hasta el otro año para ver su pago.
A no ser que descarados y cínicos que suelen ser las autoridades municopales, ignoren la orden del gobernador Fidel Herrera de no desviar el dinero de la bursatilización en gasto corriente, y lo agarren para aguinaldos y pago de proveedores.
Y no se duda que eso suceda, principalmente porque en los hechos no hay quien vigile con mano dura y apego a la legalidad el dinero del pueblo que manejan los alcaldes, conocidos por esa maña de tomar el cargo público como regalo de lotería, gracias a la complicidad o al valemadrismo de quienes tienen esa encomienda.
Por un lado el desinterés que muestra doña Clara Luz Prieto Villegas en la contraloría estatal; solapa las pillerías y se le ve sin ánimos de aplicar la ley a los ladrones de los ayuntamientos.
Y por el otro, el manto de la complicidad del titular del ORFIS Mauricio Audirac, bien conocido por sus magias para enderezar entuertos financieros y desaparecer adeudos en dependencias públicas, que le dejan jugosas ganancias.
Por esa actuación gris, la contralora del estado camina en el filo de la navaja; el mandatario estatal la tiene en la mira.
Y es que el sueño de la licenciada Prieto Villegas es ser Procuradora de Justicia; a Emeterio López Márquez le puso toneladas de piedras en el camino hasta que lo vio caer. Creyó que ella sería la sucesora. No sería nada extraño que esté haciendo lo mismo con Salvador Mikel, y a eso se deba que el chirinista no de a la fecha los resultados esperados por el gobernador.
En suma, los alcaldes que le entraron al sistema bursátil invitados por el gobernador Fidel Herrera para que lleguen más recursos a sus municipios y no tengan pretextos para no hacer obra social, afilan los dientes.
Para ellos representa sacarse la rifa del tigre.
Pero el gobernador Fidel Herrera y el secretario de Finanzas, doctor Javier Duarte, ya les leyeron la cartilla.
Por lo pronto mañana lunes se firmará con los ayuntamientos el documento de la bursatilización, y una vez más los munícipes escucharán la advertencia del gobierno Fidelista.
¿O usted qué opina?
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