¿Quién traicionará a Fidel en el 2010?
¿Reynaldo Escobar, Ranuldo Marques o el joven Adolfo Mota?
Porque es indudable que esa tercia de políticos tienen prendidas sus veladoras a San Fidel para que los tome en cuenta a la hora de la gran decisión.
Pero también cualquiera de los tres puede dar la estocada al gobernador de Veracruz, en caso de no salir premiados con la candidatura al gobierno estatal.
Cada uno de ellos cuentan con información privilegiada de todas las orgías de poder disfrutadas a lo largo del sexenio por el mandatario estatal y sus principales colaboradores quienes, además de hincharse de dinero se dieron la gran vida como funcionarios Fidelistas.
Al menos quienes trabajan como secretario de gobierno, se han dado a la tarea de recopilar documentos fidedignos de cada peso extraoficial que gastó el gobierno que late con fuerza en los últimos 12 meses del 2008.
Y no es de extrañarse que hayan hecho lo propio con los años anteriores de la administración de Fidel Herrera, es decir 2005, 2006 y 2007 para estar al día en cómo, cuando y en dónde su jefe ha distribuido esas “partidas secretas de dinero que a discreción maneja en forma personal”.
Al menos Raynaldo y Héctor, deben estar debidamente enterados que el jefe Herrera se da el lujo de tener una chequera exclusiva para atender asuntos urgentes, del orden político y periodístico.
Aguerridos políticos opositores al Partido Revolucionario Institucional han sido silenciados por no haber podido rechazar la tentación de los cañonazos de Fidel, quien ha llegado al grado de decirles “tú ponle la cantidad al cheque, la que quieras”, con tal de obtener lo que le viene en gana o sirve a sus intereses.
Lo mismo ha sucedido con algunos de los sexi-servidores del periodismo estatal identificados con otros colores políticos distintos a la Fidelidad, quienes no soportaron sobornos de 100 o 200 y hasta 500 mil pesos, con tal de pasar al servicio del colorado.
Y todos esos “pagos extras” salen, no del sueldo del mandatario estatal, sino de esa famosa “partida secreta” que maneja para “asuntos urgentes”, y que según se dice, durante 2009 es de más de 500 millones.
Las arcas de la tesorería estatal pueden estar sin clavo alguno para hacer frente a toda la lista de cobradores y prestadores de servicios que dejara pendiente Javier Duarte, y que vienen demandando el pago de facturas desde junio del año pasado, pero la chequera personal de Fidel siempre tiene fondos suficientes para el cochupo o el soborno.
Tan solvente es la cuenta bancaria confidencial que maneja el buena gente del tío Fide, que a sus cuates los reporteros del puerto jarocho les insiste que “abran sus portales en Internet, les va ir muy bien, se los aseguro”.
Y para que vean que su consejo va en serio, les suelta, para empezar, el primer cheque por 100 mil pesos. “Para que arranquen”, les dice.
Lo que Fidel ignora es que esos mismos “periodistas” que él impulsa, están al servicio, bien de Reynaldo Escobar, como sucede con los editores de una página recién inaugurada por el propio gobernador Herrera, quienes reciben prebendas económicas tanto de la secretaría de gobierno como de la legislatura estatal.
Y en solidaridad, éstos mercenarios de la pluma, entregan, con pelos y señales, toda la información de las bondades financieras de Fidel con el gremio reporteril. Y hasta donde se sabe, sus expedientes recopilatorios de información son extensos.
Bueno, nadie ignora cómo se las ha gastado Fidel en su afán porque la prensa rastrera lo idolatre, o bien lave esa imagen de farsante y traidor que arrastra.
En suma, lo cierto es que tanto Escobar, Tonicho y Mota Hernández, saben su juego dentro de la sucesión estatal en el 2010.
De entrada, los tres saben que “sus aspiraciones” nacieron muertas por no cubrir los requisitos de lealtad, confianza y continuidad del Fidelismo, que exige el político de Nopaltepec, y eso los ha llevado a que armen su propio plan “B”.
Reynaldo anda coqueteando con el moribundo PRD; Ranulfo hace lo propio con el Verde Ecologista y el PRV, y Mota, asesorado por el exgobernador Alemán Velasco y llevado de la mano por los hombres del dinero, incluído Carlos Slim, se deja querer en los Pinos.
Ninguno de la trinca de priístas ve con buenos ojos a Duarte, el delfín de Fidel, menos ahora que no levantó su precampaña en Córdoba y peor ahora que llevará como adversario panista al exfutbolista Hermosillo.
Por ello, hacen sus cuentas alegres y creen que finalmente podrían alcanzar la nominación del PRI y la Fidelidad por Veracruz.
Pero… ¿Y si no se les hace?
¿Guardarán lealtad a Fidel?
¿O usted qué opina?
¿Reynaldo Escobar, Ranuldo Marques o el joven Adolfo Mota?
Porque es indudable que esa tercia de políticos tienen prendidas sus veladoras a San Fidel para que los tome en cuenta a la hora de la gran decisión.
Pero también cualquiera de los tres puede dar la estocada al gobernador de Veracruz, en caso de no salir premiados con la candidatura al gobierno estatal.
Cada uno de ellos cuentan con información privilegiada de todas las orgías de poder disfrutadas a lo largo del sexenio por el mandatario estatal y sus principales colaboradores quienes, además de hincharse de dinero se dieron la gran vida como funcionarios Fidelistas.
Al menos quienes trabajan como secretario de gobierno, se han dado a la tarea de recopilar documentos fidedignos de cada peso extraoficial que gastó el gobierno que late con fuerza en los últimos 12 meses del 2008.
Y no es de extrañarse que hayan hecho lo propio con los años anteriores de la administración de Fidel Herrera, es decir 2005, 2006 y 2007 para estar al día en cómo, cuando y en dónde su jefe ha distribuido esas “partidas secretas de dinero que a discreción maneja en forma personal”.
Al menos Raynaldo y Héctor, deben estar debidamente enterados que el jefe Herrera se da el lujo de tener una chequera exclusiva para atender asuntos urgentes, del orden político y periodístico.
Aguerridos políticos opositores al Partido Revolucionario Institucional han sido silenciados por no haber podido rechazar la tentación de los cañonazos de Fidel, quien ha llegado al grado de decirles “tú ponle la cantidad al cheque, la que quieras”, con tal de obtener lo que le viene en gana o sirve a sus intereses.
Lo mismo ha sucedido con algunos de los sexi-servidores del periodismo estatal identificados con otros colores políticos distintos a la Fidelidad, quienes no soportaron sobornos de 100 o 200 y hasta 500 mil pesos, con tal de pasar al servicio del colorado.
Y todos esos “pagos extras” salen, no del sueldo del mandatario estatal, sino de esa famosa “partida secreta” que maneja para “asuntos urgentes”, y que según se dice, durante 2009 es de más de 500 millones.
Las arcas de la tesorería estatal pueden estar sin clavo alguno para hacer frente a toda la lista de cobradores y prestadores de servicios que dejara pendiente Javier Duarte, y que vienen demandando el pago de facturas desde junio del año pasado, pero la chequera personal de Fidel siempre tiene fondos suficientes para el cochupo o el soborno.
Tan solvente es la cuenta bancaria confidencial que maneja el buena gente del tío Fide, que a sus cuates los reporteros del puerto jarocho les insiste que “abran sus portales en Internet, les va ir muy bien, se los aseguro”.
Y para que vean que su consejo va en serio, les suelta, para empezar, el primer cheque por 100 mil pesos. “Para que arranquen”, les dice.
Lo que Fidel ignora es que esos mismos “periodistas” que él impulsa, están al servicio, bien de Reynaldo Escobar, como sucede con los editores de una página recién inaugurada por el propio gobernador Herrera, quienes reciben prebendas económicas tanto de la secretaría de gobierno como de la legislatura estatal.
Y en solidaridad, éstos mercenarios de la pluma, entregan, con pelos y señales, toda la información de las bondades financieras de Fidel con el gremio reporteril. Y hasta donde se sabe, sus expedientes recopilatorios de información son extensos.
Bueno, nadie ignora cómo se las ha gastado Fidel en su afán porque la prensa rastrera lo idolatre, o bien lave esa imagen de farsante y traidor que arrastra.
En suma, lo cierto es que tanto Escobar, Tonicho y Mota Hernández, saben su juego dentro de la sucesión estatal en el 2010.
De entrada, los tres saben que “sus aspiraciones” nacieron muertas por no cubrir los requisitos de lealtad, confianza y continuidad del Fidelismo, que exige el político de Nopaltepec, y eso los ha llevado a que armen su propio plan “B”.
Reynaldo anda coqueteando con el moribundo PRD; Ranulfo hace lo propio con el Verde Ecologista y el PRV, y Mota, asesorado por el exgobernador Alemán Velasco y llevado de la mano por los hombres del dinero, incluído Carlos Slim, se deja querer en los Pinos.
Ninguno de la trinca de priístas ve con buenos ojos a Duarte, el delfín de Fidel, menos ahora que no levantó su precampaña en Córdoba y peor ahora que llevará como adversario panista al exfutbolista Hermosillo.
Por ello, hacen sus cuentas alegres y creen que finalmente podrían alcanzar la nominación del PRI y la Fidelidad por Veracruz.
Pero… ¿Y si no se les hace?
¿Guardarán lealtad a Fidel?
¿O usted qué opina?
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