22 de marzo de 2010
Por: David Varona Fuentes
Ya se encabronó el gobernador de Veracruz Fidel Herrera Beltrán.
Y no es para menos…
El gobierno del presidente Felipe Calderón le mantiene retenidos 8 mil 500 millones de pesos, por concepto de participaciones federales.
Ufff, un chingo de lana escondida.
Y como la Secretaría de Hacienda se lo está llevando con puras promesas; que mañana, que pasado, que la próxima semana, Fidel ha llegado al máximo de su aguante.
Por lo que, con la espada desenvainada partió este lunes a la ciudad de México para entrevistarse, por la tarde, con el secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont.
Antes de viajar a la capital del país, el mandatario estatal informó que el objetivo central de la reunión con el titular de Gobernación es el relacionado con la seguridad pública, pero que aprovecharía para exigir el depósito inmediato y completo, no en partes, de los 8 mil 500 millones de pesos.
Porque hasta eso tiene la federación, atrasado y en paguitos chiquitos le viene cumpliendo a la administración Fidelista.
El asunto de la retención de los recursos federales al gobierno de Veracruz, no es asunto nuevo.
Luchar contra el goteo de los recursos federales al que lo ha sometido el régimen calderonista, ha sido la lucha sin cuartel de Fidel Herrera los últimos tres años y sus tres meses de 2010.
Ahorcar financieramente al gobernador de Veracruz, pareciera que sigue siendo la obsesión de Los Pinos y sus protegidos.
En septiembre de 2007, después de la paliza electoral que el PRI propinó al PAN en la entidad, al presidente Calderón le fueron con el chisme de que en Veracruz los rojos de la Fidelidad por Veracruz ganaban las elecciones porque se desviaban los presupuestos oficiales.
Recomendaron a Calderón que “si el PAN aspiraba a triunfar en Veracruz en los comicios federales del 5 de julio de 2009, había que amarrarle las manos al gobernador Herrera Beltrán”.
Y Calderón, violentando la ley, accedió a la sugerencia de sus asesores, quienes concedida la petición, empezaron a soñar con ganar, primero las 21 diputaciones federales intermedias, y luego en 2010 la gubernatura de Veracruz.
Desde ese año y hasta la fecha, las llaves del dinero federal permanecen cerradas o apenas semiabiertas para el gobierno de Fidel Herrera.
Y ni aún ahogándolo por la falta de recursos federales, el PAN pudo ganarle al gobernador Herrera y a su partido el PRI en las pasadas elecciones federales; nuevamente los priístas masacraron en las urnas a los candidatos blanquiazules.
Esa vez, como ya tenían restringido al gobierno del estado bajándoles el dinero a cuentagotas, los panistas no tuvieron de qué culpar al gobernador Fidel Herrera, menos insinuar siquiera que había sido otra elección de estado.
Teniendo las arcas de la tesorería estatal prácticamente semivacías, Fidel avergonzó a los operadores del PAN en Veracruz en los comicios federales de 2009.
Pero algo perverso y siniestro del gobernador de Veracruz tuvieron que haberle corrido a chismear otra vez al presidente Calderón, para que éste siga creyendo que el PAN puede ganar la gubernatura del estado, considerada la tercera más importante del país por su caudal de votos que aporta.
Es cierto, no hay dinero en Veracruz, la federación mantiene suspendidos 8 mil 500 millones de pesos al gobierno Fidelista.
Aún en medio de esa perversidad, la entidad sigue de pie; los veracruzanos se las ingenian para hacer frente a la interminable crisis financiera que azota al país, y la cual se ha venido recrudeciendo por los criminales aumentos a la gasolina, el diesel, los productos de la canasta básica y en los servicios que presta el gobierno federal, uno de éstos, la luz.
En mi última entrega, escribí en relación al exhorto presidencial del 21 de marzo con motivo del 204 aniversario del natalicio de Benito Juárez, en donde pidió la colaboración de gobernadores y presidentes municipales para hacer frente a las bandas del crimen organizado.
Fue sin dudas, un nuevo llamado del presidente Calderón.
Aquí en la gazeta.org nos hemos sumado una y otra vez a los deseos del mandatario mexicano; compartimos sus deseos de recobrar la paz y tranquilidad en el país.
Pero también, por compromisos con la verdad informativa, no nos ha temblado la mano para denunciar el doble discurso de Los Pinos, cuando por un lado llama a la unidad y reconciliación nacional, y por el otro les clava a los gobiernos priístas el peso de sus odios, rencores y fracasos.
Veracruz, es el mejor de los ejemplos, en donde un gobernador tiene que andar limosneando el dinero para su pueblo, que por ley le corresponde.
Si el discurso de Calderón el pasado 21 de marzo es diferente a los anteriores, y esta vez sí se dejará sentir el apoyo federal a los estados y municipios no panistas, o al menos el cumplimiento en la entrega de los recursos federales, júrelo usted amable lector que el gobernador Fidel Herrera retornará de la ciudad de México, con los 8 mil 500 millones de pesos que le adeuda la federación a Veracruz.
¿O usted qué opina?
Por: David Varona Fuentes
Ya se encabronó el gobernador de Veracruz Fidel Herrera Beltrán.
Y no es para menos…
El gobierno del presidente Felipe Calderón le mantiene retenidos 8 mil 500 millones de pesos, por concepto de participaciones federales.
Ufff, un chingo de lana escondida.
Y como la Secretaría de Hacienda se lo está llevando con puras promesas; que mañana, que pasado, que la próxima semana, Fidel ha llegado al máximo de su aguante.
Por lo que, con la espada desenvainada partió este lunes a la ciudad de México para entrevistarse, por la tarde, con el secretario de Gobernación Fernando Gómez Mont.
Antes de viajar a la capital del país, el mandatario estatal informó que el objetivo central de la reunión con el titular de Gobernación es el relacionado con la seguridad pública, pero que aprovecharía para exigir el depósito inmediato y completo, no en partes, de los 8 mil 500 millones de pesos.
Porque hasta eso tiene la federación, atrasado y en paguitos chiquitos le viene cumpliendo a la administración Fidelista.
El asunto de la retención de los recursos federales al gobierno de Veracruz, no es asunto nuevo.
Luchar contra el goteo de los recursos federales al que lo ha sometido el régimen calderonista, ha sido la lucha sin cuartel de Fidel Herrera los últimos tres años y sus tres meses de 2010.
Ahorcar financieramente al gobernador de Veracruz, pareciera que sigue siendo la obsesión de Los Pinos y sus protegidos.
En septiembre de 2007, después de la paliza electoral que el PRI propinó al PAN en la entidad, al presidente Calderón le fueron con el chisme de que en Veracruz los rojos de la Fidelidad por Veracruz ganaban las elecciones porque se desviaban los presupuestos oficiales.
Recomendaron a Calderón que “si el PAN aspiraba a triunfar en Veracruz en los comicios federales del 5 de julio de 2009, había que amarrarle las manos al gobernador Herrera Beltrán”.
Y Calderón, violentando la ley, accedió a la sugerencia de sus asesores, quienes concedida la petición, empezaron a soñar con ganar, primero las 21 diputaciones federales intermedias, y luego en 2010 la gubernatura de Veracruz.
Desde ese año y hasta la fecha, las llaves del dinero federal permanecen cerradas o apenas semiabiertas para el gobierno de Fidel Herrera.
Y ni aún ahogándolo por la falta de recursos federales, el PAN pudo ganarle al gobernador Herrera y a su partido el PRI en las pasadas elecciones federales; nuevamente los priístas masacraron en las urnas a los candidatos blanquiazules.
Esa vez, como ya tenían restringido al gobierno del estado bajándoles el dinero a cuentagotas, los panistas no tuvieron de qué culpar al gobernador Fidel Herrera, menos insinuar siquiera que había sido otra elección de estado.
Teniendo las arcas de la tesorería estatal prácticamente semivacías, Fidel avergonzó a los operadores del PAN en Veracruz en los comicios federales de 2009.
Pero algo perverso y siniestro del gobernador de Veracruz tuvieron que haberle corrido a chismear otra vez al presidente Calderón, para que éste siga creyendo que el PAN puede ganar la gubernatura del estado, considerada la tercera más importante del país por su caudal de votos que aporta.
Es cierto, no hay dinero en Veracruz, la federación mantiene suspendidos 8 mil 500 millones de pesos al gobierno Fidelista.
Aún en medio de esa perversidad, la entidad sigue de pie; los veracruzanos se las ingenian para hacer frente a la interminable crisis financiera que azota al país, y la cual se ha venido recrudeciendo por los criminales aumentos a la gasolina, el diesel, los productos de la canasta básica y en los servicios que presta el gobierno federal, uno de éstos, la luz.
En mi última entrega, escribí en relación al exhorto presidencial del 21 de marzo con motivo del 204 aniversario del natalicio de Benito Juárez, en donde pidió la colaboración de gobernadores y presidentes municipales para hacer frente a las bandas del crimen organizado.
Fue sin dudas, un nuevo llamado del presidente Calderón.
Aquí en la gazeta.org nos hemos sumado una y otra vez a los deseos del mandatario mexicano; compartimos sus deseos de recobrar la paz y tranquilidad en el país.
Pero también, por compromisos con la verdad informativa, no nos ha temblado la mano para denunciar el doble discurso de Los Pinos, cuando por un lado llama a la unidad y reconciliación nacional, y por el otro les clava a los gobiernos priístas el peso de sus odios, rencores y fracasos.
Veracruz, es el mejor de los ejemplos, en donde un gobernador tiene que andar limosneando el dinero para su pueblo, que por ley le corresponde.
Si el discurso de Calderón el pasado 21 de marzo es diferente a los anteriores, y esta vez sí se dejará sentir el apoyo federal a los estados y municipios no panistas, o al menos el cumplimiento en la entrega de los recursos federales, júrelo usted amable lector que el gobernador Fidel Herrera retornará de la ciudad de México, con los 8 mil 500 millones de pesos que le adeuda la federación a Veracruz.
¿O usted qué opina?
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