BUENOS DIAS VERACRUZ
Por: David Varona Fuentes
3 de mayo de 2010
Listos, Duarte, Yunes y Dante para iniciar sus campañas proselitistas en busca del voto de los veracruzanos.
Entre el 13 y 15 de mayo, los tres aspirantes a la gubernatura de Veracruz se lanzan a la conquista de la voluntad popular.
Los tres sueñan con el milagro, pero sólo uno alcanzará la proeza de convertirse en el próximo gobernador del estado.
Tanto Javier Duarte, de la Coalición PRI-PVEM-PRV, Miguel Ángel Yunes Linares, del PAN y Dante Delgado Rannauro, de la alianza PRD-PT-Convergencia, se manifiestan seguros de ganar la elección del 4 de Julio.
Los tres tienen prendidas sus respectivas veladoras.
Javier a San Fidel; Miguel a San Felipe y Santa Elba, y Dante al propio San Dante.
El priísta Duarte, se dice confiado de la respuesta del pueblo veracruzano a la trascendental obra política y social realizada por su maestro y guía Fidel Herrera, actual gobernador del estado.
Yunes Linares, confía en las carretadas de dinero que le mandarán desde el propio gobierno federal y del SNTE. Al menos eso es lo que le prometieron, falta ver que cumplan sus padrinos, Calderón y la Gordillo.
Mientras que Dante Alfonso confía exclusivamente en Dante Delgado, al trabajo realizado como gobernador sustituto de cuatro años, de 1988 a 1992, que terminaron llevándolo a prisión acusado de peculado por 400 millones de pesos en 1996.
Las apuestas políticas están abiertas a favor del colorado, del azul y del candidato naranja.
Los verdaderos e imparciales analistas del quehacer político veracruzano, se inclinan por Javier Duarte, por consolidarlo la continuidad del extraordinario y aceptado trabajo realizado por el mandatario Herrera Beltrán.
Las primeras encuestas de las principales casas dedicadas al rating ciudadano, coinciden en el triunfo del priísta, dándole ventaja de hasta 25 puntos sobre su principal seguidor Yunes Linares del PAN, y hasta 40 puntos sobre el convergente Delgado Rannauro.
Como siempre suele ocurrir, los candidatos ubicados por abajo en los sondeos de preferencia ciudadana, desacreditan dichos trabajos de opinión, lanzan maldiciones y señalan que son encuestas pagadas y manipuladas.
Si Yunes o Dante aparecieran por arriba de Duarte, seguro que aceptarían esas muestras de aceptación pre-electoral.
Dicen los grandes filósofos que todos estamos ciegos y que únicamente vemos los que nos conviene ver…
Es posible que tengan razón.
Porque Yunes y Dante, aún sabiéndose perdidos, concientes que no lograron levantar en sus actividades como precandidatos, sueñan con ganar la elección del primer domingo de Julio.
Los reporteros y columnistas críticos del sistema, no mandan hacer las encuestas, para que los candidatos que van directo a la derrota, se les echen encima tildándolos de entreguistas.
Claro, es inocultable que hay de reportero a reporteros y de columnistas a columnistas, y que como en la viña del señor existen de surtido rico, de dulce, de mole y de rajas.
Llamados de otra manera…
Hay verdaderas lacras del periodismo, consumados mercenarios y amaestrados bufones al servicio de quien pague más, y cuando algunos de estos tres grupos practican el “periodismo”, es cuando a muchos nos da vergüenza decirnos periodistas.
Los que nos hemos identificado con los lectores precisamente por practicar un periodismo plural, criticando errores y excesos de la clase gobernante, pero también reconociendo aciertos a favor de los gobernados, siempre seremos aceptados por los lectores, los radioescuchas y los televidentes.
El rating que se alcanza en cada programa, son el reflejo, son el censor de la aceptación ciudadana.
Lamentablemente, muchos de los políticos que hoy son candidatos a algún cargo de elección popular, no quieren ver su realidad, no aceptan las críticas de que el 4 de Julio representa su tumba política.
Insisto que las encuestas o trabajos de captura de las preferencias ciudadanas, representan un avance político-electoral de lo que se avecina el día de la jornada cívica.
Y en base a esos resultados preliminares de las empresas encuestadoras, es como los columnistas que hemos vividos las y mil y una elecciones a lo largo y ancho del territorio nacional, nos atrevemos a descifrar el escenario que vivirá el estado de Veracruz en su próximo proceso electoral.
Por lo tanto, de aquí hasta el 4 de Julio, seguiré insistiendo que por medio de los votos, contando en forma transparente cada uno de los sufragios, el triunfo será para el priísta Javier Duarte.
El joven Duarte tiene el respaldo contundente y decisivo de la obra sexenal de Fidel, y la gente de Veracruz es agradecida, y principalmente no está ciega ni sorda, sabe ver, escuchar, distinguir o comparar, cuando un gobierno estatal fue de resultados o de fracasos.
Yunes, aún y que sus padrinos –que parecen haberlo dejado solo-Calderón y doña Elba Esther decidan entregarle todo el dinero para la compra de votos, al turco lo persiguen los fantasmas de su pasado truculento y tenebroso. 90 días de campaña en Veracruz no serán suficientes para pedirle al pueblo veracruzano que finja demencia
Dante, viene otra vez de vacaciones al estado; ni él mismo sabe qué papel quiere jugar en esta nueva elección por la gubernatura.
Entonces, amables lectores…
Vamos bien, o nos regresamos.
¿O usted qué opina?
Por: David Varona Fuentes
3 de mayo de 2010
Listos, Duarte, Yunes y Dante para iniciar sus campañas proselitistas en busca del voto de los veracruzanos.
Entre el 13 y 15 de mayo, los tres aspirantes a la gubernatura de Veracruz se lanzan a la conquista de la voluntad popular.
Los tres sueñan con el milagro, pero sólo uno alcanzará la proeza de convertirse en el próximo gobernador del estado.
Tanto Javier Duarte, de la Coalición PRI-PVEM-PRV, Miguel Ángel Yunes Linares, del PAN y Dante Delgado Rannauro, de la alianza PRD-PT-Convergencia, se manifiestan seguros de ganar la elección del 4 de Julio.
Los tres tienen prendidas sus respectivas veladoras.
Javier a San Fidel; Miguel a San Felipe y Santa Elba, y Dante al propio San Dante.
El priísta Duarte, se dice confiado de la respuesta del pueblo veracruzano a la trascendental obra política y social realizada por su maestro y guía Fidel Herrera, actual gobernador del estado.
Yunes Linares, confía en las carretadas de dinero que le mandarán desde el propio gobierno federal y del SNTE. Al menos eso es lo que le prometieron, falta ver que cumplan sus padrinos, Calderón y la Gordillo.
Mientras que Dante Alfonso confía exclusivamente en Dante Delgado, al trabajo realizado como gobernador sustituto de cuatro años, de 1988 a 1992, que terminaron llevándolo a prisión acusado de peculado por 400 millones de pesos en 1996.
Las apuestas políticas están abiertas a favor del colorado, del azul y del candidato naranja.
Los verdaderos e imparciales analistas del quehacer político veracruzano, se inclinan por Javier Duarte, por consolidarlo la continuidad del extraordinario y aceptado trabajo realizado por el mandatario Herrera Beltrán.
Las primeras encuestas de las principales casas dedicadas al rating ciudadano, coinciden en el triunfo del priísta, dándole ventaja de hasta 25 puntos sobre su principal seguidor Yunes Linares del PAN, y hasta 40 puntos sobre el convergente Delgado Rannauro.
Como siempre suele ocurrir, los candidatos ubicados por abajo en los sondeos de preferencia ciudadana, desacreditan dichos trabajos de opinión, lanzan maldiciones y señalan que son encuestas pagadas y manipuladas.
Si Yunes o Dante aparecieran por arriba de Duarte, seguro que aceptarían esas muestras de aceptación pre-electoral.
Dicen los grandes filósofos que todos estamos ciegos y que únicamente vemos los que nos conviene ver…
Es posible que tengan razón.
Porque Yunes y Dante, aún sabiéndose perdidos, concientes que no lograron levantar en sus actividades como precandidatos, sueñan con ganar la elección del primer domingo de Julio.
Los reporteros y columnistas críticos del sistema, no mandan hacer las encuestas, para que los candidatos que van directo a la derrota, se les echen encima tildándolos de entreguistas.
Claro, es inocultable que hay de reportero a reporteros y de columnistas a columnistas, y que como en la viña del señor existen de surtido rico, de dulce, de mole y de rajas.
Llamados de otra manera…
Hay verdaderas lacras del periodismo, consumados mercenarios y amaestrados bufones al servicio de quien pague más, y cuando algunos de estos tres grupos practican el “periodismo”, es cuando a muchos nos da vergüenza decirnos periodistas.
Los que nos hemos identificado con los lectores precisamente por practicar un periodismo plural, criticando errores y excesos de la clase gobernante, pero también reconociendo aciertos a favor de los gobernados, siempre seremos aceptados por los lectores, los radioescuchas y los televidentes.
El rating que se alcanza en cada programa, son el reflejo, son el censor de la aceptación ciudadana.
Lamentablemente, muchos de los políticos que hoy son candidatos a algún cargo de elección popular, no quieren ver su realidad, no aceptan las críticas de que el 4 de Julio representa su tumba política.
Insisto que las encuestas o trabajos de captura de las preferencias ciudadanas, representan un avance político-electoral de lo que se avecina el día de la jornada cívica.
Y en base a esos resultados preliminares de las empresas encuestadoras, es como los columnistas que hemos vividos las y mil y una elecciones a lo largo y ancho del territorio nacional, nos atrevemos a descifrar el escenario que vivirá el estado de Veracruz en su próximo proceso electoral.
Por lo tanto, de aquí hasta el 4 de Julio, seguiré insistiendo que por medio de los votos, contando en forma transparente cada uno de los sufragios, el triunfo será para el priísta Javier Duarte.
El joven Duarte tiene el respaldo contundente y decisivo de la obra sexenal de Fidel, y la gente de Veracruz es agradecida, y principalmente no está ciega ni sorda, sabe ver, escuchar, distinguir o comparar, cuando un gobierno estatal fue de resultados o de fracasos.
Yunes, aún y que sus padrinos –que parecen haberlo dejado solo-Calderón y doña Elba Esther decidan entregarle todo el dinero para la compra de votos, al turco lo persiguen los fantasmas de su pasado truculento y tenebroso. 90 días de campaña en Veracruz no serán suficientes para pedirle al pueblo veracruzano que finja demencia
Dante, viene otra vez de vacaciones al estado; ni él mismo sabe qué papel quiere jugar en esta nueva elección por la gubernatura.
Entonces, amables lectores…
Vamos bien, o nos regresamos.
¿O usted qué opina?
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