BUENOS
DÍAS VERACRUZ
David
Varona Fuentes
Jueves
18 de abril del 2013.
¿Al
servicio de quiénes?
Sin lugar a dudas ha quedado demostrado que
cuando el estado quiere, la usa como instrumento de persecución y venganza
política, pero también para exonerar.
Se cumple aquella sentencia bíblica:
Para los enemigos justicia a secas; para los
amigos, justicia y gracia.
¿Qué pasa en el país con la aplicación
estricta de la ley…?
Cuando conviene, el escándalo mediático:
La PGR anuncia la aprehensión de altos
funcionarios del Gobierno mexicano señalados de cometer delitos graves del
orden federal, como narcotráfico y delincuencia organizada.
Los responsables de la Fiscalía de la Nación,
con bombo y platillo, festejan la detención, de quienes, según ellos,
consideran traidores de la patria, esos que por embolsarse millones de
dólares decidieron aliarse y proteger a los carteles del crimen
organizado.
Pero de pronto…
El gobierno sucesor, llega y ordena la
liberación de quienes, su antecesor, mandó a prisión acusado de los delitos más
graves en México.
Y de pronto también, la misma autoridad
ministerial de la Federación dependiente de la PGR, que encabezó las
investigaciones criminales, que presuntamente obtuvo las pruebas fehacientes,
que consignó y solicitó al Juez Federal las respectivas órdenes de aprehensión,
acepta y reconoce que se “equivocó, que la incriminación considerada
exitosa por los altos jefes, fue de “oídas”.
De pronto, el MPF premiado en su momento con
honores de heroísmo y lealtad a la nación por atrapar a desleales servidores
públicos al servicio de traficantes de drogas, anuncia que fue engañado y
burlado vilmente por sus testigos protegidos que le habían asegurado que fulano
y perengano de la SIEDO y de la Secretaría de la Defensa Nacional, tenían nexos
con los capos del narcotráfico en México.
Y…usted disculpe., nos equivocamos.
Dos eventos muy sonados, de las últimas
horas, han sacudió a los órganos de justicia en México, evidenciando su
dependencia y entrega al Poder Ejecutivo Federal.
Primero, la absolución y libertad este lunes
15 de abril, del ex titular de la SIEDO Noé Ramírez Mandujano, detenido en
noviembre de 2008 acusado de recibir hasta 450 mil dólares mensuales del cartel
de la organización criminal de los hermanos Beltrán Leyva.
Y segundo, la inminente liberación del
general Tomás Ángeles Dauahare, ex subsecretario de la SEDENA en el gobierno de
Felipe Calderón, tras siete meses de encarcelamiento acusado también de brindar
protección al cartel de los hermanos Beltrán Leyva.
Ramírez Mandujano, abandona la cárcel después
de 4 años cinco meses de prisión. El Juez Primero de Distrito de Procesos
Penales Federales en el estado de Nayarit, Mauricio Fernández de la Mora,
consideró que las evidencias y testigos presentados en su contra no solo
eran insuficientes para ameritar su encarcelamiento, sino que pudieran
tratarse de una fabricación de pruebas.
El general Tomás Ángeles Dauahare, corrió la
misma suerte. El Juez Tercero de Distrito de Procesos Penales Federales con
residencia en el estado de México, canceló el juicio que se inició en su contra
por delincuencia organizado con la finalidad de cometer delitos contra la
salud,
En ambos casos, la PGR anunció que no
interpondría nuevas acusaciones.
Vuelvo a preguntar:
¿Qué pasa con la justicia en México?
A partir del pasado lunes con la
exoneración del ex zar antidrogas, Ramírez Mandujano y con el
anuncio de la libertad del alto militar, Tomás Ángeles, la impartición de
justicia atraviesa por momentos críticos y es vergüenza dentro y más allá
de nuestras fronteras.
No es para menos.
Nadie cree los argumentos que han salido a
dar algunos funcionarios del gobierno del presidente Enrique Peña Nieto.
Por salud del aparato judicial mexicano,
sería interesante que aquellos que hoy se desgarran las vestiduras por salvar
lo insalvable en materia de justicia, dieran a conocer cuándo el
Ministerio Público cumple con su función, y cuando es usado como instrumento
político para cobrarle facturas a los amigos o enemigos de los hombres del
poder en turno.
El mandatario Peña Nieto, ha manifestado que
el caso de Ramírez Mandujano debe servir de ejemplo para que en el
futuro no vuelvan a cometerse ese tipo de latrocinios al amparo de la
ley. Y que eso se logrará mediante la capacitación de los agentes del
Ministerio Público
No es así, señor presidente.
El Ministerio Público es una instancia de
buena fe; los abusos del poder se han encargado de hundirlo en la corrupción y
el descrédito social; la mayoría ha dejado de confiar en el MP, del fuero común
o de la federación.
La inoperancia y los abusos que cometen
quienes están al frente de esa representación social, son ordenadas desde lo
más alto del poder. La clase política, empezando por los gobernadores de los
estados, se han encargado de prostituirlo y envilecerlo.
Yo pregunto:
¿Cuántos mexicanos, comunes y corrientes, se
encuentran privados de su libertad a causa de la siembra de pruebas falsas de
un Ministerio Público?
Concluyo:
Que no se desespere la maestra Elba
Esther Gordillo, tarde que temprano, se dará a conocer que otra
vez, el MPF de la PGR, se equivocó.
Un
líder de cualquier organización política; es poderoso…hasta que el gobierno
quiera que sea poderoso.
Ahí
está la Gordillo pagando el precio de su soberbia y desacato a las órdenes de
quien manda en México
¿O
usted qué opina?
PUNTA
DE LANZA.
CHISMES
DE LAVADEROS
Continúan los pleitos y chismes de vecindad
entre panistas y priístas, ahora en su nueva versión referente a cuestiones de
espionaje.
Señores,
por favor, dejen ya de servir de distractores a los grandes problemas
estatales, y dedíquense unos, los rojos del gobierno estatal, a cumplir con sus
responsabilidades que para eso les pagan, y a los azules, hagan
política de altura, digna de un proceso electoral como el que se avecina en
Veracruz.
Dejen a un lado ese lenguaje hostil, de
censura y crítica, del cual los veracruzanos están hasta el…gorro.
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