lunes, 7 de febrero de 2011

¡EL HORNO NO ESTÁ PARA BOLLOS¡

BUENOS DÍAS VERACRUZ

Por: David Varona Fuentes
8 de febrero de 2011

Otro revés electoral para el PRI.
Dos tropiezos consecutivos.
Primero en el estado de Guerrero, que hasta con las uñas defendió el PRD llevando como candidato al ex priísta Ángel Aguirre.
Ahora, en Baja California Sur, entidad que el PAN arrebata al PRD con todo y mayoría en el Congreso local, después de 12 años de gobierno del Sol Azteca.
Del PRI, todavía comandado por la generala Beatriz Paredes Rangel, y del brabucón dirigente electo, Humberto Moreira, ni sus luces.
Dos descalabros al hilo del Partido Revolucionario Institucional, en tiempos que el nefasto, perverso y tenebroso, Carlos Salinas de Gortari, ha tomado las riendas del tricolor y de la promoción del virtual candidato a la presidencia, Enrique Peña Nieto.
Desde que reapareció en México el demonio de Aguas Leguas, Nuevo León, y agarró los hilos del partido, el PRI ha retornado a la ruta de la derrota electoral.
No es para menos.
El PRI ha vuelto a ser besado por el diablo.
Qué equivocados están aquellos políticos, tiburones y delfines, que consideran al expresidente Salinas guía y promotor de la unidad del nuevo PRI en su camino de regreso a Los Pinos.
Es posible que en efecto Salinas de Gortari una a toda la familia priísta nacional y al pueblo mexicano, pero… en su contra.
Aunque los jóvenes gobernantes muchas veces los traten de retrasados mentales, los mexicanos tienen memoria.
Por ello, de cada 10 mexicanos, 8 responsabiliza a Salinas de la crisis económica de 1994 que sumergió al país en una parálisis gubernamental, de la que ninguno de los tres últimos titulares del Poder Ejecutivo Federal, Zedillo, Fox y Calderón, han logrado sacarlo, al contrario México sigue hundiéndose, no hay expectativas de desarrollo social y la carestía de la vida para las familias más pobres se ha elevado criminalmente hasta en un 2 mil por ciento en los dos sexenio gobernados por militantes del Partido Acción Nacional.
México se encuentra en peores circunstancias políticas, sociales, financieras y de seguridad pública, que las heredadas por Salinas, pero éste fue el artífice de las desgracias que enfrenta el país.
Gracias a las reformas constitucionales de Salinas de Gortari, un mexicano hijo de padre extranjero, opositor al PRI, Vicente Fox Quezada, pudo arribar a la presidencia de la República, ayudado por la grisácea actuación del gran simulador de la democracia, Ernesto Zedillo, el presidente sustituto. Y vaya si el hombre de las botas resultó un fiasco como huésped de Los Pinos, seguido por un Felipe Calderón, quien en su quinto año de mandato no sabe hacia donde dirige a México que no sea a una lucha estéril, perdida contra el crimen organizado, que ha causado la muerte a casi 40 mil personas, entre éstos muchos miles de inocentes.
Salinas es el que abrió las puertas de Palacio nacional al PAN, y echemos un vistazo cómo se encuentra México.
Y ahora, el político más odiado a lo largo y ancho de la geografía nacional, sin ningún sesgo de vergüenza es traído de paseo a Veracruz para que declare que el PRI recuperará la presidencia en las elecciones de 2012.
Acumulando reveces electorales de aquí a la elección de julio de 2012, como los de Guerrero y Baja California, más los que se acumulen en el camino, se duda que el PRI llegue vivo, seguro y galopante a la contienda presidencial.
Y es que el horno priísta no está como bollos.
Los dos últimos fracasos del partido tricolor, el de Guerrero con Manuel Añorve Baños, y el de Ricardo Barroso, en Baja California Sur, son motivos de pugnas internas en el alto mando del CEN, unos responsabilizan a la todavía dirigente del CEN, Beatriz Paredes por la pésima elección de los candidatos, y otros la defienden y exoneran.
Lo cierto es que de nueva cuenta el PRI está siendo amenazado por el fantasma de la división, que lo llevó al fracaso en las urnas en 2006 con Roberto Madrazo.
A nadie extrañaría que el culpable del caos que enfrenta el PRI por las dos derrotas estatales, sea también Carlos Salinas aplicando la máxima de divide y vencerás.
Qué no se dan cuenta los políticos de la vieja guardia, los dinosaurios, que la sombra del ex mandatario mexicano será la perdición del PRI y de su candidato del 2012.
Las señales del canal de las estrellas indican que el abanderado presidencial del PRI sería el gobernador mexiquense, Enrique Peña Nieto, si es que sale con vida de la contienda de julio en su estado y conserva la gubernatura.
Salinas asegura que el PRI regresa a Los Pinos, pero no dice el nombre del candidato. .
Informes de primera mano en nuestro poder, afirman que el caballo negro del expresidente es otro sonorense.
“No se hagan bolas, el candidato es Beltrones”, sería la respuesta de Salinas a la militancia tricolor, hoy que se ha apoderado del CEN del PRI.
¿O usted qué opina?

P.D. En tiempos de ineptitud, qué fácil es echarle la culpa a otros de actos vandálicos.

davidvaronaf@hotmail.com

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