El presidente Felipe Calderón no quita los ojos sobre Veracruz.
Ahora menos que el gobernador de ésta entidad se encuentra dentro de aquellos ocho mandatarios priístas que tienen en la mira en Los Pinos por sus presuntos vínculos con el narcotráfico y las bandas del crimen organizado.
Señalamientos todos, de acuerdo a los resultados que arrojan exhaustivas investigaciones de inteligencia nacional y militar.
Incriminaciones que a Calderón no le temblaron las manos ni la boca para echárselas en cara a la cúpula tricolor en aquella ríspida reunión sostenida el mes pasado en la residencia oficial.
De aquel encuentro escabroso del presidente con la generala Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa Patrón y los 14 gobernadores del Partido Revolucionario Institucional, en Veracruz se han presentado fenómenos inusitados que llevan el objetivo de confundir tanto a la clase política estatal como a los propios miembros activos y militantes del Partido Acción Nacional.
No hay día que a través de conferencias de prensa o informaciones, que se asegura son facturadas con cargo al gobierno Fidelista, que no se insista que el candidato del PAN al gobierno de Veracruz en el 2010 será de nueva cuenta Gerardo Buganza Salmerón.
Para quienes saben del quehacer político no dudan que “esa campaña de promoción al actual diputado federal plurinominal oriundo de Córdoba, lleva intereses personales del mandatario veracruzano Fidel Herrera”.
Motivo por el cual cobra vigencia aquel señalamiento el cual presume que Buganza recibió entre los meses de junio y julio 10 millones de pesos para “sus actividades personales” de manos de Fidel, de cuya cantidad ocupó gran parte para pagar adeudos de su campaña del 2004.
Aparecer en la palestra y anunciarle a sus íntimos que ya cuenta otra vez con el padrinazgo político de quienes lo apoyaron en 2004 para alcanzar la candidatura blanquiazul al gobierno estatal, no ha sido gratis para Buganza ni a sus principales promotores de palacio de gobierno.
Las sospechas de su vinculación con el gobernador Herrera está saliendo muy cara al exsíndico de la ciudad de los Treinta Caballeros, de cuyo cargo se sirvió para hacer grandes negocios.
Y una muestra de que los panistas están enterados de las andanzas y componendas con la Fidelidad de Buganza, Juan Bueno Torio y Julen Rementería, son los resultados de las elecciones internas para elegir a los candidatos a diputados plurinominales, en las que sus recomendados resultaron apaleados por los del grupo comandado desde la ciudad de México.
De no ser un zorro político con sus costales de mañas a cuestas, Fidel Herrera Beltrán bien pudiera echar las campanas al vuelo de confiarse en sus amigos los integrantes de la trinca infernal, que viene asegurándole que a su acérrimo enemigo Miguel Ángel Yunes Linares lo alcanzó la muerte política en forma adelantada.
Pero no es así, el tío Fide sabe, huele e intuye que el director general del ISSSTE no se encuentra muerto en sus posibilidades de alcanzar la nominación azul; sus conocimientos místicos se lo confirman al político de Nopaltepec.
Y las presunciones de Herrera Beltrán se confirman cada ocasión que Yunes viene a Veracruz a criticar su labor como gobernador.
Fidel no ignora que si el funcionario federal estando en tierras veracruzanos se encarga de censurar los resultados alcanzados por su administración, es porque lo hace con el respaldo del presidente Calderón.
Yunes Linares es también otro político que actúa siempre en forma zorruna, que nunca da paso adelante si la institucionalidad no se lo indica.
Por lo que, las declaraciones de Miguel Ángel el domingo pasado en esta ciudad capital Xalapa recordándole a Fidel los días que le restan de gobernador, sus excesos y recomendarle que saque bien sus cuentas”, no son nada fortuitas y reflejan el sentir y la visión que su jefe el michoacano tiene de Veracruz.
Es indudable que el director del ISSSTE sigue siendo el candidato del presidente.
Y mientras llega la hora de las definiciones, Yunes está en lo suyo: Todo un equipo a su servicio acumula archivos y más archivos del destino de Veracruz en los últimos cuatro años, material que será la punta de lanza de su campaña.
Quienes ven el enorme potencial en Yunes para lograr sus objetivos, le recomiendan que no empiece mal.
Que no caiga en los vicios del pasado de prometer y no cumplir.
Los veracruzanos no quieren otros seis años de más de lo mismo.
¿O usted qué opina?
Ahora menos que el gobernador de ésta entidad se encuentra dentro de aquellos ocho mandatarios priístas que tienen en la mira en Los Pinos por sus presuntos vínculos con el narcotráfico y las bandas del crimen organizado.
Señalamientos todos, de acuerdo a los resultados que arrojan exhaustivas investigaciones de inteligencia nacional y militar.
Incriminaciones que a Calderón no le temblaron las manos ni la boca para echárselas en cara a la cúpula tricolor en aquella ríspida reunión sostenida el mes pasado en la residencia oficial.
De aquel encuentro escabroso del presidente con la generala Beatriz Paredes Rangel, Manlio Fabio Beltrones, Emilio Gamboa Patrón y los 14 gobernadores del Partido Revolucionario Institucional, en Veracruz se han presentado fenómenos inusitados que llevan el objetivo de confundir tanto a la clase política estatal como a los propios miembros activos y militantes del Partido Acción Nacional.
No hay día que a través de conferencias de prensa o informaciones, que se asegura son facturadas con cargo al gobierno Fidelista, que no se insista que el candidato del PAN al gobierno de Veracruz en el 2010 será de nueva cuenta Gerardo Buganza Salmerón.
Para quienes saben del quehacer político no dudan que “esa campaña de promoción al actual diputado federal plurinominal oriundo de Córdoba, lleva intereses personales del mandatario veracruzano Fidel Herrera”.
Motivo por el cual cobra vigencia aquel señalamiento el cual presume que Buganza recibió entre los meses de junio y julio 10 millones de pesos para “sus actividades personales” de manos de Fidel, de cuya cantidad ocupó gran parte para pagar adeudos de su campaña del 2004.
Aparecer en la palestra y anunciarle a sus íntimos que ya cuenta otra vez con el padrinazgo político de quienes lo apoyaron en 2004 para alcanzar la candidatura blanquiazul al gobierno estatal, no ha sido gratis para Buganza ni a sus principales promotores de palacio de gobierno.
Las sospechas de su vinculación con el gobernador Herrera está saliendo muy cara al exsíndico de la ciudad de los Treinta Caballeros, de cuyo cargo se sirvió para hacer grandes negocios.
Y una muestra de que los panistas están enterados de las andanzas y componendas con la Fidelidad de Buganza, Juan Bueno Torio y Julen Rementería, son los resultados de las elecciones internas para elegir a los candidatos a diputados plurinominales, en las que sus recomendados resultaron apaleados por los del grupo comandado desde la ciudad de México.
De no ser un zorro político con sus costales de mañas a cuestas, Fidel Herrera Beltrán bien pudiera echar las campanas al vuelo de confiarse en sus amigos los integrantes de la trinca infernal, que viene asegurándole que a su acérrimo enemigo Miguel Ángel Yunes Linares lo alcanzó la muerte política en forma adelantada.
Pero no es así, el tío Fide sabe, huele e intuye que el director general del ISSSTE no se encuentra muerto en sus posibilidades de alcanzar la nominación azul; sus conocimientos místicos se lo confirman al político de Nopaltepec.
Y las presunciones de Herrera Beltrán se confirman cada ocasión que Yunes viene a Veracruz a criticar su labor como gobernador.
Fidel no ignora que si el funcionario federal estando en tierras veracruzanos se encarga de censurar los resultados alcanzados por su administración, es porque lo hace con el respaldo del presidente Calderón.
Yunes Linares es también otro político que actúa siempre en forma zorruna, que nunca da paso adelante si la institucionalidad no se lo indica.
Por lo que, las declaraciones de Miguel Ángel el domingo pasado en esta ciudad capital Xalapa recordándole a Fidel los días que le restan de gobernador, sus excesos y recomendarle que saque bien sus cuentas”, no son nada fortuitas y reflejan el sentir y la visión que su jefe el michoacano tiene de Veracruz.
Es indudable que el director del ISSSTE sigue siendo el candidato del presidente.
Y mientras llega la hora de las definiciones, Yunes está en lo suyo: Todo un equipo a su servicio acumula archivos y más archivos del destino de Veracruz en los últimos cuatro años, material que será la punta de lanza de su campaña.
Quienes ven el enorme potencial en Yunes para lograr sus objetivos, le recomiendan que no empiece mal.
Que no caiga en los vicios del pasado de prometer y no cumplir.
Los veracruzanos no quieren otros seis años de más de lo mismo.
¿O usted qué opina?
PUNTA DE LANZA:
No cabe la menor duda que es grande la desesperación del gobernador Fidel Herrera; la intensa y mercenaria campaña llevada a cabo al publicar las encuestas patito sobre su “alto nivel” de popularidad del político cuenqueño; es una farsa más del gran simulador, quien siente que el tiempo se le viene encima.
Sus delirios de locura de llegar a la presidencia de la república, lo hace cometer gravísimos errores de cálculo político, en donde de ante mano aún no quiere entender que nada tiene qué hacer en la carrera por lograr la candidatura presidencial del partido tricolor.
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