Lo cierto es que no hubo sorpresas en el Consejo Político del PRI en Veracruz, y por mayoría aprobaron el método de Convención de Delegado para sacar a los candidatos del 2010.
Había sido una semana tediosa, de chismes, amenazas y advertencias, provenientes de priístas rebeldes, desobedientes y reacios a someterse a las órdenes superiores del priísmo estatal.
Incluso llegó a decirse que grupos simpatizantes al diputado local Héctor Yunes Landa, boicotearían el evento como manera de protesta por la imposición del procedimiento para sacar al futuro candidato tricolor a la gubernatura.
Quizás por miedo o temor a que las pasiones se incendiaran en el conclave tricolor, 187 de los 650 delegados rigurosamente seleccionados y acreditados, decidieron no hacer acto de presencia.
En el puerto jarocho se habló con mucha insistencia que Jorge Moreno Salinas, ex Secretario de Seguridad Pública en el gobierno del ratón Miguelito y gente muy cercana al precandidato Yunes Landa, era el principal operador del boicot, en el que participarían grupos de choques expertos en ocasionar todo tipo de desmanes.
Pero de nueva cuenta, todo quedó en rumores, y sin problema alguno se impuso la gran mayoría de los representantes del tricolor asistentes al Consejo Político estatal celebrado el sábado en el World Trade Center, quienes consintieron que la elección de los abanderados a gobernador, diputados locales y presidentes municipales, sea a través de delegados y no por medio de encuestas, como exigían algunas voces al interior del priísmo veracruzano.
Al inconforme Yunes Landa, sólo quedó el consuelo de que se le permitiera el uso de la voz en el Consejo, que aprovechó para pedir que al método de delegados se le agregara un instrumento de medición de reating de popularidad, petición que fue apoyada por el joven Adolfo Mota.
De ahí en fuera, todo resultó viento en popa a la dirigencia estatal del PRI, cuando apenas días antes a la reunión priísta la amenazaban barruntos de tempestad.
Resuelto el primer obstáculo, ahora será el Comité Ejecutivo Nacional de la generala Beatriz Paredes, el que recibirá y analizará la propuesta de los priístas del estado de Veracruz para sacar al candidato a gobernador, a los 50 para diputados locales y los 212 a igual número de alcaldías.
Se sabe que el planteamiento del CDE de Veracruz hecho al CEN del PRI para elegir a los soldados que harán frente a las batallas del 4 de julio, se suma a otros en los mismos términos que han realizado las dirigencias de las nueve entidades federativas en las que también habrá elecciones en 2010 para renovar al titular del Poder Ejecutivo.
Es decir, los 10 gobernadores priístas, incluido Fidel Herrera de Veracruz, se encuentran unidos en torno al proceso selectivo tradicional de su partido, que para ellos resulta menos complicado y sin tantos riesgos de escisión en las filas priístas.
Aún cuando el alto mando tricolor será el que diga la última palabra, todo apunta que aprobará y ratificará el deseo de sus correligionarios en los 10 estados del país donde habrá elecciones.
Por lo pronto, en Veracruz muchos tienen motivos para empezar a echar las campanas al vuelo…
Esta vez, sin aspavientos y guardando las composturas, Javier Duarte, celebró en silencio; sabe que ha ganado la primera batalla a sus contrapartes, la interna de su partido.
Pese a no ignorar que las encuestas y sondeos de opinión que sobre Veracruz tiene en su poder la generala Paredes no lo apuntalan como el priísta mejor posesionado, Duarte confía en su buena estrella.
Y para el joven legislador cordobés y muchos de sus falsos redentores, como dicen en los pueblos, “este arroz ya se coció”.
Por lo mientras, el delfín de la Fidelidad Javier Duarte de Ochoa, sigue avanzando en caballo de hacienda rumbo a la candidatura priísta para la elección constitucional del próximo 4 de julio, considerada por las chuchas cuereras en esta materia, como la “madre de todas las batallas”.
Y se ve más que difícil que puedan tirarlo del caballo Fidelista.
Héctor Yunes Landa, principal opositor a Duarte, parece hacer honor al apodo impuesto en palacio de gobierno, y resignado espera negociar “posiciones para su gente”. Este lunes 14 de diciembre, adelanta el festejo de navidad con reporteros del puerto jarocho. La cita es 19:30 horas en Costa de Oro, en la residencia de su hermano César, y ha trascendido lanzará algunos misiles guardados.
Pero ya nadie le cree, por “sacatón” su misma gente empieza a abandonarlo.
¿O usted qué opina?
Había sido una semana tediosa, de chismes, amenazas y advertencias, provenientes de priístas rebeldes, desobedientes y reacios a someterse a las órdenes superiores del priísmo estatal.
Incluso llegó a decirse que grupos simpatizantes al diputado local Héctor Yunes Landa, boicotearían el evento como manera de protesta por la imposición del procedimiento para sacar al futuro candidato tricolor a la gubernatura.
Quizás por miedo o temor a que las pasiones se incendiaran en el conclave tricolor, 187 de los 650 delegados rigurosamente seleccionados y acreditados, decidieron no hacer acto de presencia.
En el puerto jarocho se habló con mucha insistencia que Jorge Moreno Salinas, ex Secretario de Seguridad Pública en el gobierno del ratón Miguelito y gente muy cercana al precandidato Yunes Landa, era el principal operador del boicot, en el que participarían grupos de choques expertos en ocasionar todo tipo de desmanes.
Pero de nueva cuenta, todo quedó en rumores, y sin problema alguno se impuso la gran mayoría de los representantes del tricolor asistentes al Consejo Político estatal celebrado el sábado en el World Trade Center, quienes consintieron que la elección de los abanderados a gobernador, diputados locales y presidentes municipales, sea a través de delegados y no por medio de encuestas, como exigían algunas voces al interior del priísmo veracruzano.
Al inconforme Yunes Landa, sólo quedó el consuelo de que se le permitiera el uso de la voz en el Consejo, que aprovechó para pedir que al método de delegados se le agregara un instrumento de medición de reating de popularidad, petición que fue apoyada por el joven Adolfo Mota.
De ahí en fuera, todo resultó viento en popa a la dirigencia estatal del PRI, cuando apenas días antes a la reunión priísta la amenazaban barruntos de tempestad.
Resuelto el primer obstáculo, ahora será el Comité Ejecutivo Nacional de la generala Beatriz Paredes, el que recibirá y analizará la propuesta de los priístas del estado de Veracruz para sacar al candidato a gobernador, a los 50 para diputados locales y los 212 a igual número de alcaldías.
Se sabe que el planteamiento del CDE de Veracruz hecho al CEN del PRI para elegir a los soldados que harán frente a las batallas del 4 de julio, se suma a otros en los mismos términos que han realizado las dirigencias de las nueve entidades federativas en las que también habrá elecciones en 2010 para renovar al titular del Poder Ejecutivo.
Es decir, los 10 gobernadores priístas, incluido Fidel Herrera de Veracruz, se encuentran unidos en torno al proceso selectivo tradicional de su partido, que para ellos resulta menos complicado y sin tantos riesgos de escisión en las filas priístas.
Aún cuando el alto mando tricolor será el que diga la última palabra, todo apunta que aprobará y ratificará el deseo de sus correligionarios en los 10 estados del país donde habrá elecciones.
Por lo pronto, en Veracruz muchos tienen motivos para empezar a echar las campanas al vuelo…
Esta vez, sin aspavientos y guardando las composturas, Javier Duarte, celebró en silencio; sabe que ha ganado la primera batalla a sus contrapartes, la interna de su partido.
Pese a no ignorar que las encuestas y sondeos de opinión que sobre Veracruz tiene en su poder la generala Paredes no lo apuntalan como el priísta mejor posesionado, Duarte confía en su buena estrella.
Y para el joven legislador cordobés y muchos de sus falsos redentores, como dicen en los pueblos, “este arroz ya se coció”.
Por lo mientras, el delfín de la Fidelidad Javier Duarte de Ochoa, sigue avanzando en caballo de hacienda rumbo a la candidatura priísta para la elección constitucional del próximo 4 de julio, considerada por las chuchas cuereras en esta materia, como la “madre de todas las batallas”.
Y se ve más que difícil que puedan tirarlo del caballo Fidelista.
Héctor Yunes Landa, principal opositor a Duarte, parece hacer honor al apodo impuesto en palacio de gobierno, y resignado espera negociar “posiciones para su gente”. Este lunes 14 de diciembre, adelanta el festejo de navidad con reporteros del puerto jarocho. La cita es 19:30 horas en Costa de Oro, en la residencia de su hermano César, y ha trascendido lanzará algunos misiles guardados.
Pero ya nadie le cree, por “sacatón” su misma gente empieza a abandonarlo.
¿O usted qué opina?
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