¡¡VERACRUZ SIGUE EN EL OJO DEL HURACÁN!!

Se acaba el año 2009, aún cuando muchos desearían que el reloj político se paralizara y que el 2010, nunca llegara.
Y no es para menos…
Los agoreros del desastre anuncian barruntos de tempestad en la entidad que gobierna el priísta Fidel Herrera Beltrán.
Todo, provocado por la lucha encarnizada que desatará la sucesión gubernamental, en la que el principal opositor viene con todo el apoyo presidencial no sólo para buscar ganar la contienda en las urnas, sino que, si es necesario, arrebatar el triunfo.
Según versiones provenientes del más alto nivel político de este país, han empezado a correr la voz que “el candidato de Los Pinos”, trae la consigna de reventar la elección.
Esos comentarios, ciertos o falsos, traen inquietos y nerviosos a propios y extraños, tanto en palacio de gobierno como en el Partido Revolucionario Institucional.
Por ello, no quisieran que terminara 2009, darían todo porque continuara la fiesta de la Fidelidad, que la pachanga se eternizara.
Pero el paso del tiempo es inevitable, lo que viene tendrá que llegar, justo en el momento propicio, ni antes ni después, porque la política es de tiempos y es de ritmos.
Se va el 2009 y con él, un año más de Fidel Herrera al frente del Poder Ejecutivo de Veracruz, desde luego, con altas y bajas, con errores y aciertos en el ejercicio del mandato constitucional.
Muchos son los logros del gobernador Herrera en este año que termina, y que sumados a los cuatro de su sexenio, han proyectado a Veracruz con pasos agigantados hacia la modernidad.
Pero también mayores son los retos para el 2010.
Aún con todo lo efectuado en sus cinco años de gobierno, Fidel no se siente complacido; está consciente que falta mucho por hacer, que todavía existen graves rezagos sociales que no se terminan en seis años de administración.
Y es que mientras persistan 4 millones de veracruzanos marginados y en pobreza extrema, cualquier gobernante, sensible y humanista, sentirá incompleto el trabajo realizado durante su gobierno.
Es indudable que Fidel ha puesto todo lo mejor de sus capacidades y virtudes al frente del gobierno de Veracruz, partiendo que recibió un estado hundido en la desconfianza popular y principalmente, quebrado, sin un peso en caja y con más de 6 mil millones de pesos de deuda pública.
Y en medio de esos vendavales, políticos y financieros, Fidel ha sabido sortear los grandes males del estado.
Cierto es, desconoce el futuro de Veracruz en los próximos años.
No se sabe quién será el sucesor de Fidel, aún cuando algunos ya hayan echado las campanas al vuelo, y actúen ya como gobernador en funciones.
Y por lo tanto, se ignora si empataría o rebasaría la obra realizada por Herrera Beltrán.
Hoy las aguas se encuentran agitadas en la geografía estatal.
Son peligrosos los vientos huracanados que amenazan al estado por la jornada electoral del 2010.
Veracruz, sigue estando en el ojo del huracán; el gobierno calderonista no ha quitado el dedo del renglón.
Mientras tanto, la clase política estatal, festeja la llegada de la navidad; en posadas y brindis con amigos, cómplices y fieles, se tira la casa por la ventana.
¿O usted qué opina?

P.D: Un día don Fernando Gutiérrez Barrios me dijo:
“Mi estimado David, usted nunca vaya a donde no lo llamen… consejo que llevo profundamente como una enseñanza política…por lo tanto señor gobernador, muchas gracias por su “gentileza” al invitarnos a su brindis con los medios de comunicación.