BUENOS DIAS VERACRUZ
Por: David Varona Fuentes
23 de septiembre de 2010
Nueva visita del presidente Felipe Calderón a Veracruz.
Este viernes volverá al lado de los veracruzanos afectados por el Huracán Karl; estará en los municipios de Veracruz y Cotaxtla.
Sin lugar a dudas, la presencia del mandatario mexicano por segunda ocasión consecutiva en una semana, significa aliento y esperanza para los hermanos que lo perdieron todo en las inundaciones quedando en lamentable desgracia.
Y desde luego, con Calderón otra vez en Veracruz es evidente el respaldo absoluto del presidente de la república al gobernador del estado, Fidel Herrera Beltrán.
Pareciera que la desgracia de un pueblo, terminó con los “malos entendidos” entre el presidente Calderón Hinojosa y el gobernador Herrera Beltrán, producto del veneno puro inyectado en Los Pinos por mentes maquiavélicas que no quieren a Veracruz.
Siempre escribí que si al gobernador Herrera le iba mal, mal le iría a Veracruz y a sus más de 7 millones de habitantes.
Y a ese perverso juego de difamar, denostar e injuriar, apostaron todo el sexenio Fidelista los adversarios del mandatario veracruzano.
Gracias a las “recomendaciones” de sus recalcitrantes enemigos en Los Pinos, Fidel es el peor de los monstruos políticos creados en Veracruz, al que señalan de todo presunto delito cometido, pero que hasta la fecha nada le comprueban.
Tal vez el único delito de Fidel es gobernar cercano a la gente; atendiendo y resolviendo todos los problemas en forma directa; sin intermediarios; sin trabas burocráticas, ni encuentros ni compromisos agendados.
Esa forma de Fidel para ejercer el poder que tantas simpatías ha despertado en el pueblo veracruzano, causó molestia e irritación en más de uno de quienes odian a Herrera Beltrán, y en venganza llevaron chismes y diatribas al presidente Calderón quien, hay que decirlo: hizo suyos los odios y venganzas de otros.
Los últimos años del gobierno de Fidel Herrera, está lleno de puertas cerradas en la Federación.
Mientras que los demás gobernadores del país, no importando las siglas partidistas, han venido viviendo mandato en el más completo de los paraísos financieros, al de Veracruz lo marginaron, prácticamente buscaban ahorcarlo al cerrarle las llaves del dinero de la federación, cuando no le quitaban, le suspendían o escondían las partidas presupuestarias.
El objetivo era acabarlo políticamente reteniendo el dinero que por ley pertenecía al estado de Veracruz.
Ante todas las embestidas federales, el gobernador Fidel Herrera, aguantó; como “buen Gavilán, no chilló”, en cambio siempre respondió al presidente Calderón con respeto y lealtad institucional, con actitud republicana.
Hoy parece que las relaciones entre Felipe y Fidel, han tomado mejor camino.
Reitero: No importa que la recomposición política entre el presidente y el gobernador se de en medio de la desgracia de varios cientos de miles de veracruzanos.
Al contrario, eso demuestra que para Calderón valen más las vidas de los veracruzanos que enfrentan la peor de sus tragedias, que los rumores que de la chistera política salen en contra de Fidel Herrera.
Hay que reconocer la determinación asumida por el presidente de México de hacer a un lado posibles odios y rencores contra Veracruz, y volcarse a ayudar a los afectados por los fenómenos naturales.
Hoy el apoyo que reciben los damnificados por el Huracán Karl por parte del gobierno federal, es toda una realidad.
El presidente estuvo el lunes en Veracruz con su esposa Margarita Zavala y parte de su gabinete, y acompañado del gobernador Fidel Herrera recorrieron las zonas inundadas. Ese mismo día Calderón prometió todo el apoyo de su gobierno para Veracruz y sus damnificados.
Incluso como muestra que cumpliría su palabra dejó en prenda a su secretario de Desarrollo Social, Heriberto Félix Guerra, y pidió a su esposa Margarita Zavala, presidenta del DIF nacional, regresara a Veracruz.
Este viernes, Calderón estará de nueva cuenta con el gobernador Herrera y los damnificados de Veracruz, Boca del Río y Cotaxtla, y “trae la buena noticia” de que este jueves fueron depositados los primeros recursos para la reconstrucción de los municipios dañados por Karl: 127 millones para rehabilitar carreteras; 11 millones para obras hidráulicas y 350 mil pesos para tareas de salud.
Indudable que es dinero insuficiente; los números de Fidel suman 50 mil millones de pesos en afectaciones.
Pero por algo se empieza; peor es nada.
¿O usted qué opina?
davidvaronaf@hotmail.com
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