El turco Miguel Ángel Yunes Linares, ha decidido terminar con las especulaciones que lo enferman y renuncian del ISSSTE, ahuyentándole el sueño de su vida en el 2010.
Quiere también cerrarle la boca de una vez por todas al cordobés Gerardo Buganza Salmerón, que vocifera y tapiza ciudades enteras con espectaculares suyos, porque dice, será, otra vez, el candidato a gobernador.
Desea al mismo tiempo frenar las aspiraciones del senador Juan Bueno Torio, que anda tocando las puertas de Bucareli, recordándole a Mouriño todos los contratos de Pemex que le entregó a la empresa de su padre.
Por todos los perros que le disputan el hueso que siente suyo, ha tomado la decisión de su vida.
Ahora sí se afiliará al Partido Acción Nacional.
Su alma y corazón los vestirá de azul, después que treinta años le pertenecieran al Revolucionario Institucional, instituto al que en sus años de juventud juró nunca renunciar.
Los panistas preparan la gran fiesta.
La afiliación de Yunes al Partido Acción Nacional, será convertida en una fiesta popular, con el mariachi cantando El Rey, y vitoreando su nombre al ritmo de la batucada jarocha.
Todo al viejo estilo priísta, del que Yunes se lo sabe al revés y al derecho.
Los organizadores del evento buscarán reunir alrededor de 5 mil militantes en la sede estatal del partido, en Xalapa, la capital del estado.
El punto de reunión sería la Plaza Lerdo, de donde saldría la gran caravana rumbo al comité directivo que todavía preside el Pipo Vázquez.
Se hacen ya las contrataciones de por lo menos 500 autobuses de las diversas ciudades del estado, para trasladar a los borregos azules al acto masivo, que podría celebrarse el domingo 22 de junio, o bien esperar la asunción de Enrique Cambranis en la dirigencia estatal.
Alejandro Vázquez Cuevas, quiere entregar la estafeta llevándose el alto honor de haber registrado a Yunes como militante activo de su partido, pero Cambranis también reclama ese derecho.
Yunes quisiera afiliarse de inmediato pasa saciar ese egocentrismo de protagónico que le caracteriza, pero está en medio del dilema si lo hace con Juana o con Chana.
Desearía hacerlo estando todavía el Pipo como dirigente, en pago a las prebendas políticas que le entregó a su hijo, a quien primero le regaló la diputación local y luego la candidatura a la alcaldía por Boca del Río, cargo donde el junior se siente todo un pequeño principito.
Sin embargo, tiene presente que Cambranis será el nuevo líder, y para Yunes, muerto el rey, viva el nuevo rey.
Mientras deciden la fecha, los preparativos siguen su marcha; el objetivo es hacer un chingo de escándalo político el día del evento, el suficiente para sacar de sus casillas al huésped principal de palacio de gobierno.
Y según algunos de los organizadores, estaría confirmada la presencia de la plana mayor del panismo nacional, encabezada por el líder Germán Martínez Cázares, senadores y diputados federales.
Para muchos más que su afiliación al PAN, la de Yunes sería el virtual registro como candidato al gobierno de Veracruz
Y entonces sí, todos a ponerse a temblar; el diablo habrá llegado.
Por cierto, y a todo este borlote yo me pregunto. ¿Quién pagará los 500 camiones para acarrear a los panistas?
¿La militancia azul que habla pestes de Yunes, se disciplinará?
¿O usted qué opina?
Quiere también cerrarle la boca de una vez por todas al cordobés Gerardo Buganza Salmerón, que vocifera y tapiza ciudades enteras con espectaculares suyos, porque dice, será, otra vez, el candidato a gobernador.
Desea al mismo tiempo frenar las aspiraciones del senador Juan Bueno Torio, que anda tocando las puertas de Bucareli, recordándole a Mouriño todos los contratos de Pemex que le entregó a la empresa de su padre.
Por todos los perros que le disputan el hueso que siente suyo, ha tomado la decisión de su vida.
Ahora sí se afiliará al Partido Acción Nacional.
Su alma y corazón los vestirá de azul, después que treinta años le pertenecieran al Revolucionario Institucional, instituto al que en sus años de juventud juró nunca renunciar.
Los panistas preparan la gran fiesta.
La afiliación de Yunes al Partido Acción Nacional, será convertida en una fiesta popular, con el mariachi cantando El Rey, y vitoreando su nombre al ritmo de la batucada jarocha.
Todo al viejo estilo priísta, del que Yunes se lo sabe al revés y al derecho.
Los organizadores del evento buscarán reunir alrededor de 5 mil militantes en la sede estatal del partido, en Xalapa, la capital del estado.
El punto de reunión sería la Plaza Lerdo, de donde saldría la gran caravana rumbo al comité directivo que todavía preside el Pipo Vázquez.
Se hacen ya las contrataciones de por lo menos 500 autobuses de las diversas ciudades del estado, para trasladar a los borregos azules al acto masivo, que podría celebrarse el domingo 22 de junio, o bien esperar la asunción de Enrique Cambranis en la dirigencia estatal.
Alejandro Vázquez Cuevas, quiere entregar la estafeta llevándose el alto honor de haber registrado a Yunes como militante activo de su partido, pero Cambranis también reclama ese derecho.
Yunes quisiera afiliarse de inmediato pasa saciar ese egocentrismo de protagónico que le caracteriza, pero está en medio del dilema si lo hace con Juana o con Chana.
Desearía hacerlo estando todavía el Pipo como dirigente, en pago a las prebendas políticas que le entregó a su hijo, a quien primero le regaló la diputación local y luego la candidatura a la alcaldía por Boca del Río, cargo donde el junior se siente todo un pequeño principito.
Sin embargo, tiene presente que Cambranis será el nuevo líder, y para Yunes, muerto el rey, viva el nuevo rey.
Mientras deciden la fecha, los preparativos siguen su marcha; el objetivo es hacer un chingo de escándalo político el día del evento, el suficiente para sacar de sus casillas al huésped principal de palacio de gobierno.
Y según algunos de los organizadores, estaría confirmada la presencia de la plana mayor del panismo nacional, encabezada por el líder Germán Martínez Cázares, senadores y diputados federales.
Para muchos más que su afiliación al PAN, la de Yunes sería el virtual registro como candidato al gobierno de Veracruz
Y entonces sí, todos a ponerse a temblar; el diablo habrá llegado.
Por cierto, y a todo este borlote yo me pregunto. ¿Quién pagará los 500 camiones para acarrear a los panistas?
¿La militancia azul que habla pestes de Yunes, se disciplinará?
¿O usted qué opina?
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