¿GANARÁ EL CÁRTEL DE LAS LOMAS?

¿Qué le sabe Raúl Arias Lobillo al gobernador Fidel Herrera, para que éste apoye su reelección en la rectoría de la Universidad Veracruzana?
Es la pregunta que se hace la comunidad universitaria en todos los planteles educativos de la máxima Casa de Estudios en el estado.
Porque sin lugar a dudas, el Lobillo va que vuela en caballo de haciendo rumbo a su tercer periodo como rector de la UV.
Raúl, “El Pedro Navajas de la UV”, luce intocable en todas las transas que se le involucra, como si estuviera blindado y protegido con el manto de la impunidad Fdelista, que tantos dolores de cabeza ha causado al propio tío Fide.
Para lograr su objetivo, Arias Lobillo viene gastando carretadas de dinero de la propia institución, tanto en imagen personal en medios de circulación nacional, como en la renta de autobuses de primera clase para acarrear incondicionales a las facultades donde se presenta, para que lo vitoreen y lancen porras, a los que se presume, paga entre dos y tres mil pesos por armar el escándalo de apoyo.
Pero principalmente, en su carrera reeleccionista Raúl Arias violenta el artículo 10 de la Ley de Autonomía de la UV, que específica que “un rector podrá reelegirse sólo una vez en el cargo”.
Sin embargo, al ex amasio de la protagonista principal de los Chiles Xalapeños, parece no importarle cuántas leyes tenga que violar con tal de hacer realidad su enfermiza obsesión de perpetuarse otros cuatro años al frente de la UV.
Para eso, vocifera a los cuatro vientos, “tengo a mi amigo el gobernador Fidel Herrera”.
Yo pregunto…
¿Para qué dice tener el Lobillo al mandatario estatal?
Acaso para que Fidel lo cubra con el manto de la complicidad y pueda quedarse otro período más como rector universitario.
Grave, muy grave error estaría cometiendo el gobernador Herrera, sí en efecto, como asegura Arias, que “su amigo Fidel se encuentra detrás del operativo de planchado de los nueve integrantes de la Junta de Gobierno de la UV, para que logre reelegirse en la rectoría”.
Sería saludable por su propia investidura de ejecutivo estatal que le impone dar ejemplos de imparcialidad, y también por la presunta autonomía universitaria que tanto se cancanea, que el mandatario veracruzana desmintiera su dizque apoyo a Raúl Arias Lobillo.
Que los dados de la elección están cargados a favor de la reelección del actual rector, es la opinión que tienen todos los demás aspirantes a dirigir los destinos de la Universidad Veracruzana.
Y eso mismo aseguran catedráticos, estudiantes, trabajadores y líderes sindicales cuyos gremios tienen contratos laborales con la UV.
Es de tal magnitud, dicen, el apoyo que Lobillo viene recibiendo de palacio de gobierno, que uno de los más férreos adversarios, el viejo universitario Félix Báez Jorge, decidió ayer viernes tirar la toalla y retirarse de la contienda.
Como argumento de salida, el antropólogo Báez señala que “la lucha es dispareja y da como un hecho que Arias Lobillo, por ser el candidato palacio, se quedará en la rectoría”.
Anoche trascendió que Rafael Arias Hernández, otro de los contendientes a ocupar la rectoría, también podría decidir renunciar a sus aspiraciones, bajo los mismos motivos que Báez Jorge.
Y conforme vaya acercándose el día en que la Junta de Gobierno emita su veredicto final, los otros dos candidatos, Clara Celina Medina y Francisco Montfort Guillén, terminarán declinando a sus pretensiones.
Por lo pronto, los viejitos de la Junta de Gobierno, José Sarukhán, Miguel Limón, Enrique Florescano, Mario Muñoz, Santiago Vázquez, Carlos Octavio Rivera, Silvia del Amo Rodríguez, Romualdo López y José Negrete, se dicen listos para pronunciarse a favor de Arias Lobillo.
De antemano y en forma unánime, los nueve se prestaron al juego del poder político, desechando todo el historial de corrupción y basura que envuelve a Raúl Arias Lobillo, que había sido presentando como denuncia pública por parte de los demás candidatos.
Por esa seguridad maliciosa y perversa que ya nuestra el Lobillo, anunciando tener en la bolsa la ansiada reelección hasta el 31 de agosto de 2013, es necesario replantear la interrogante inicial…
¿Qué pecado mortal es el que asegura saberle el pillo mayor de la UV al gobernador Fidel Herrera, como para que le cumpla caprichos personales aún en medio de ese cochinero que mantiene en la UV?
¿O usted qué opina?