BUENOS DIAS VERACRUZ
Por: David Varona Fuentes
18 de agosto de 2010
No nos equivocamos…
Los “Diálogos por la Seguridad”, un engaño más del gobierno federal al pueblo mexicano.
No hay tal interés de la federación en combatir en forma conjunta la ola de criminalidad que azota al país.
Y muestra a nuestros oportunos comentarios, son los acontecimientos que se suscitan, que evidencian la molestia al doble discurso del presidente Felipe Calderón en la lucha anticrimen.
Los coordinadores políticos de las bancadas opositoras al PAN en San Lázaro y en el Senado de la República, han dicho a Calderón que si sabe contar, que no cuente con ellos este jueves 19 de agosto en la reunión en el Campo Marte.
Los representantes partidistas en el Senado han descubierto el juego presidencial, y pretextando atenciones a su agenda no acudirán al encuentro semanal sobre “Diálogos por la Seguridad”.
El senador Manlio Fabio Beltrones, representante de la bancada del Partido Revolucionario Institucional, afirma tener compromisos con su partido sustraídos con anterioridad a la fecha dispuesta por la presidencia de la república.
Ricardo Monreal, líder de la fracción del Partido del Trabajo en el senado, argumenta la atención de comisiones de su investidura.
Pedro Jiménez León, jefe de los senadores de Convergencia, después de dudar porque no recibía la autorización de su jefe y dueño del partido Dante Delgado, finalmente confirmó que no acudirá.
El senador Arturo Escobar y Vega, del Partido Verde Ecologista de México, disciplinándose a los designios del PRI con el que siempre va en alianza y a quien debe su subsistencia política, dice que no irá a Campo Marte.
En cuanto a los coordinadores políticos en San Lázaro, entro éstos el priísta Francisco Rojas, y el perredista Alejandro Encinas, ambos se pronuncian por no hacer acto de presencia en la reunión con Calderón para tratar el tema de la inseguridad pública de México.
Una rápida reflexión sobre la decisión de los líderes partidistas de no participar en el foro “Diálogos por la Seguridad”, implementados por el gobierno de la república, nos conduce, en efecto, a que “dejarán en su mesa plantado al presidente Calderón”, tal como lo afirman los principales periódicos nacionales críticos del país.
No es para menos la determinación de Beltrones y demás representantes de los diversos partidos políticos en las Cámaras de Diputados y Senadores…
Con medias verdades o mentiras verdaderas, no puede llegarse a ningún lado, menos alcanzar acuerdos para atender el grave problema del flagelo de la inseguridad pública que causa muerte, terror, zozobra y desesperación en el pueblo mexicano.
Apenas este martes escribí para ustedes queridos lectores, la simulación y doble discurso del presidente Felipe Calderón en el llamado a combatir al crimen organizado.
Nos da la razón la declinación unánime de los diversos actores políticos de México de rechazar la invitación presidencial para debatir sobre el tema de la inseguridad nacional.
En el caso personal del senador Beltrones, excusa que la invitación de Los Pinos le llegó apenas unas cuantas horas de antelación a la cita; pero no es de extrañarse que haya sucedido lo mismo con los demás coordinadores parlamentarios.
Que la proposición calderonista a los “Diálogos por la Paz”, se convirtiera en llamadas al vapor, al cuarto para las doce, deja entrever, bien la perversión o el desinterés de la presidencia de la república en reunir a un sector tan primordial en la vida política nacional para atender y encontrar respuestas para atacar a la delincuencia organizada en el aspecto legislativo-jurídico.
Pero bueno, si Calderón no cumple su palabra a los gobernadores de los estados de liberarles recursos adicionales para el combate criminal, aún cuando son éstos la parte vertebral para encontrar resultados positivos, qué desaires no pueden esperar los demás protagonistas políticos de México.
Es cruel decirlo por muchos mandatarios estatales que pueden estar a la espera de algún chispazo de verdad y certidumbre por parte de la federación.
Pero todo indica que, al menos en el renglón de la seguridad pública, a todos los actores políticos están agarrando de pendejos.
Y no lo inventamos aquí nosotros buscando convertirnos en los paladines de la verdad.
Si la inmensa mayoría de los periodiqueros y falsos seudoeditores están convertidos en simples traductores informativos de noticias, es su problema, tal vez gracias a su misión vergonzante de servilismo, han logrado subsistir.
En www.lagazeta.org simple y llanamente damos lectura a las actuaciones de quienes mostrando caras de angustia, congoja o tormento, dicen estar preocupados por devolverles la paz y tranquilidad arrebatadas a los 120 millones de mexicanos.
¡¡Mienten!!
Lo más real es que al equipo de colaboradores del presidente Calderón en materia de seguridad pública, importe madres que sigan matando mexicanos inocentes a la luz del día, total no son de su familia.
Quizás el manto de la complicidad con la que se cubre a gobernadores de extracción panista de entidades donde capos de las drogas vivían en el paraíso sin ser molestados por las autoridades estatales, sea el mensaje más directo de la federación de que la “guerra” contra los narcotraficantes y crimen organizado es también una simulación, una falacia, una ilusión para los incrédulos.
El gobernador de Veracruz, Fidel Herrera Beltrán, es un soldado del presidente en turno tratándose de alcanzar beneficios para México. A Calderón nunca regatea apoyos solidarios de su gobierno, ni siquiera en los peores momentos de linchamiento político, a la guerra sucia, a los que ha sido sometido por la supuesta gente cercana al actual huésped de Los Pinos.
Pero, los recursos financieros no llegan, ni los pendientes suspendidos por intereses electorales, ni los prometidos para hacer frente a la delincuencia organizada.
A ver hasta cuándo aguanta la ilusión.
¿O usted qué opina?
No hay comentarios:
Publicar un comentario