jueves, 7 de enero de 2010

“QUE SE INCORPORE VERACRUZ…PUES VIENE LO MEJOR”


“Y… viene lo mejor”.
Reza el nuevo slogan publicitario del gobierno del estado de Veracruz.
Mañana, tarde y noche, la población veracruzana es bombardeada en radio y televisión con los promocionales de fin de sexenio que pintan el “maravilloso” Veracruz que no todos quieren ver, o se resisten aceptar porque simplemente no existe.
¿Pero realmente qué significa, qué mensaje cifrado o qué lectura debe darse al recién estrenado promocional Fidelista, por el que también se despilfarra mucho dinero de los impuestos del pueblo veracruzano?
¿Hasta dónde es verdad que “viene lo mejor” para el estado y sus cuatro millones de habitantes en pobreza extrema?
¿O se trata sólo de otra mentira más?
Salir a la palestra a decir que “vamos bien y… viene lo mejor”, resultaría una afirmación temeraria si los números, cifras, inversiones no cuadraran y que las grandes obras presuntamente realizadas, terminaran unas, siendo falacias verdaderas, y otras por la mala calidad de los materiales, abandonadas, sin prestar servicio y a punto de derrumbarse, como sucede con una clínica de la Secretaría de Salud, en la comunidad de Pueblo Nuevo, en el municipio de Álamo.
Que “viene…lo mejor”, también incluye la incesante inseguridad pública que agobia a los veracruzanos, considerado el talón de Aquiles, la piedra en el zapato del gobernador Herrera.
Que las calles del estado sigan llenándose de sangre, que los hogares de inocentes continúen enlutándose, y que empresarios o los hijos de éstos terminen siendo víctimas de levantones y secuestros, serían muestras que las promesas son de saliva, tinta y papel.
No es fácil salir a decirle a los veracruzanos que “vamos bien, y…viene lo mejor”, representan un compromiso de grandes magnitudes.
Es indudable que el joven gobernante de Veracruz tiene “buenas intenciones para este 2010”.
Pero, grandes son los retos, y la caja del dinero estatal, parece estar vacía, sin clavo alguno. O al menos que, como andan comentando en las oficinas de palacio de gobierno, “el dinero, los cientos, quizás miles de millones de pesos, están sudando en alguna institución bancaria”. Y que de ahí saldrán directo a la campaña proselitista de aquel que resulte candidato a gobernador.
Lo que significa que aún teniendo dinero en las arcas, esos recursos ya tienen destino, y por lo tanto todos los cobradores del gobierno del estado, si saben contar, que no cuenten con su pago antes del 4 de julio, si al caso les abonarán con promesas.
Y es que la herencia de conflictos financieros que arrastra la administración Fidelista del 2009 es indeseable, volvería loco a cualquiera.
Y no es para menos…
Porque le deben a todo mundo.
Por un lado el gobierno estatal enfrenta exigencias de pago de una larga lista de proveedores y contratistas, a quienes adeuda cantidades millonarias desde hace varios meses.
La misma bronca tiene con diversos medios informativos, a los que ha pedido volver a refacturar porque los documentos de cobro pendientes, están fechados en julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre y diciembre de 2009, y dicho año fiscal ya terminó.
En iguales circunstancias dicen estar los ayuntamientos priístas del estado, los cuales reclaman al gobierno del estado lleve a los hechos lo que asegura a la prensa. Y es que resulta que los alcaldes están sumamente encabronados porque aseguran que “están jineteando sus recursos”, y en diciembre nada más les dieron “abonitos para pagar aguinaldos”.
La realidad es que así como los alcaldes se encuentran ahorcados, algunas secretarías de despacho también andan por la calle de la amargura. Hasta el indio Tizoc lo tienen con las manos amarradas, y mayor es su desesperación por no poder hacer negocio subastando candidaturas a diputados y alcaldías.
En suma, no la tiene nada fácil Fidel para éste 2010 que le roba el sueño.
No somos agoreros del desastre y deseamos que le vaya bien al gobernador Herrera, para que le vaya bien a Veracruz.
Pero, “vamos bien y… viene lo mejor”, todavía es un sueño. Los índices de pobreza en el estado todavía son alarmantes, y en las zonas urbanas la situación tiende a empeorarse en 2010.
Por lo pronto, los grandes ayuntamientos como Veracruz, Xalapa, Córdoba, Minatitlán, Coatzacoalcos, Poza Rica, Tuxpan y Orizaba, han empezado a despedir empleados al iniciar el año.
¿Entonces, para quién viene lo mejor?
¿O usted qué opina?

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