SE REBELAN LOS COLORADOS

Veracruz es un hervidero político por las candidaturas en el Partido Revolucionario Institucional.
La militancia tricolor se encuentra sumamente encabronada por la repentina aparición de golondrinos que no han hecho verano para hacerse merecedores a las designaciones.
Aquellos priístas que dicen tener los años de trabajo esperando la oportunidad de ser nominados por su partido, están revelándose al alto mando del PRI en Veracruz.
Y aseguran, amenazan que reventarán las convenciones municipales y distritales si son ignorados en la hora final de acordar las candidaturas.
No es para menos la sublevación priísta.
A lo largo y ancho de la geografía estatal se observan desde subastadores oficiales que dicen llevar la representación de palacio de gobierno, hasta enviados y negociadores políticos de quien presume ser el delfín, el selecto, el escogido en acuerdo familiar para representar al tricolor en la contienda electoral por la gubernatura en este 2010.
Todos llevan la encomienda de hacer redituables las designaciones del PRI a diputados locales y presidentes municipales; bien en lo financiero o en lo político.
Es decir, el PRI de Veracruz convertirá en candidatos oficiales a todo aquel o a todos aquellos que estén dispuestos a comprar las candidaturas al precio que se les imponga.
No importa que sean burros consumados en política y en el servicio público o legislativo.
El requisito indispensable es que tengan dinero, un chingo de dinero que dar a la campaña del candidato a gobernador.
Claro, de paso en su misión de armar los paquetes de candidatos para el 2010, los operadores de palacio de gobierno andan pidiendo apoyar a Javier Duarte Ochoa, asegurando que este será el abanderado priísta al gobierno del estado.
En los casos más difíciles, los enviados tienen la encomienda de planchar a todos aquellos priístas rebeldes que se quieren pasar de listos, y que a decir verdad, son muchos, un chingo dijeran algunas voces, para quienes no alcanzará el dinero ni tampoco los cargos a repartir que les ofrezcan para que dimitan en sus intenciones.
No la tiene fácil el PRI de la Fidelidad.
Así traten los oficiosos de la comunicación de minimizar los hechos bochornosos que se presentan en cada municipio del estado por la imposición de candidatos, lo cierto es que la cúpula priísta del estado se encuentra convertida en un verdadero desorden.
El negocio de armar fórmulas de candidatos para la jornada electoral del próximo domingo 4 de julio, se salió del control.
Y no es para menos…
El Tizoc veracruzano en la dirigencia estatal del PRI Jorge Carvallo, es un cero a la izquierda, no ata ni desata, es sólo una figura decorativa al que no se le permite hablar, opinar, menos proponer candidatos; si al caso le ordenan a quién hay que chingarle un billetote por las aspiraciones que tenga de ser candidato a diputado o a presidente municipal.
Reitero, los ánimos están desastados…
A muchos de los que se les había prometido la candidatura tricolor a cambio de un servicio social prestado al gobierno estatal, hoy ni siquiera son recibidos en palacio estatal o en Casa Veracruz. También fueron agarrados de pendejos, y eso los tiene encendidos, encolerizados, al grado que ya coquetean con ofrecimientos de otras siglas opositoras.
Es innegable que ese viejo juego del engaño, va tener consecuencia desastrosas en los comicios del 4 de julio.
Pareciera que la intención es echarle más leña a la hoguera, como si el estado no estuviera ya encendido con tanta inseguridad en las calles, corrupción y despilfarro de recursos de los recursos del pueblo.
Recuerdo al generalísimo ex gobernador de Veracruz, Sixto Adalberto Tejeda Olivares, quien al escuchar los informes de que en equis pueblo estaban agrandando los problemas sociales echándole más leña a la hoguera, sabiamente contestaba…
-“Déjenlos, más grande será la llamarada”.
Y en esa parte del trabajo sucio, papel primordial están jugando los periodiqueros al servicio del estado…
Por un lado los serviles comunicadores continúan tratando de venderle al pueblo de Veracruz un producto no conocido, que no es confiable, que promete mucho como todos.
Es vergonzante que a huevos, los mercachifles de Duarte busquen meterlo con calzador en el ánimo de los veracruzanos, denostando al enemigo más visible a vencer, ignorando que ellos mismos están convirtiéndose en los mejores publi-relacionistas del adversario.
Incluso, en ese juego de perversidades que está dejando buenos resultados al virtual candidato de los azules, hasta participa el encuestador de la Mitofsky, pero bueno, a este le pagan para decir mentiras.
Sinceramente creo que no había necesidad de incendiar Veracruz con eso de las candidaturas.
En un principio se había dicho que la orden era “buscar a los mejores candidatos; hombres y mujeres de acciones y reputación incuestionables”.
Si la orden ha sido cambiada, el único que perderá es el PRI.
¿O usted qué opina?